BENIDORM. El Grupo Municipal Socialista ha afirmado hoy que la reciente instalación de las máquinas expendedoras de tickets en las zonas verde y naranja está sirviendo para que la ciudadanía de Benidorm "descubra, de forma definitiva, la gran farsa y el engaño masivo del gobierno de Toni Pérez".
La portavoz socialista, Cristina Escoda, ha señalado que “a los vecinos se les ha caído la venda de los ojos”. Según ha explicado la edil, “durante años, el Partido Popular vendió la zona de residentes, en un principio señalizada con una línea continua blanca, como un espacio de estacionamiento exclusivo para empadronados. Sin embargo, ver ahora cómo plantan parquímetros en la puerta de sus casas es la prueba irrefutable de que todo era mentira: no querían facilitar la vida al residente, querían hacer caja con el espacio público".
Escoda ha destacado que el "malestar en los barrios es palpable" porque “los vecinos por fin se están dando cuenta de la realidad de la gestión del PP”. La portavoz ha recordado que el PSOE votó en contra de la modificación de la ordenanza de movilidad; una reforma que el PP aprobó con su mayoría para dividir la zona de residentes en colores y permitir, vía pago de ticket, que cualquier persona no residente o turista pueda ocupar las plazas "que en un principio el alcalde publicitó y promocionó como aparcamiento exclusivo para empadronados".
Afán recaudatorio y tasa turística encubierta
“Lo advertimos y nos llamaron alarmistas, pero el tiempo nos ha dado la razón. Han convertido las calles de nuestros barrios en una inmensa zona azul camuflada”, ha denunciado Escoda. Para los socialistas, esta medida no es más que una “tasa turística encubierta” nacida del “voraz afán recaudatorio de Toni Pérez, que va a reducir drásticamente las posibilidades de aparcar de los residentes, quienes ahora tendrán que competir por su plaza con cualquiera que pague la tarifa".
Asimismo, la dirigente socialista ha querido lanzar un aviso a navegantes ante la deriva del gobierno local. "Que a nadie le pille por sorpresa, el siguiente paso en la hoja de ruta de Toni Pérez va a ser implantar el pago en los aparcamientos disuasorios. Ya lo avanzó el edil de Movilidad con las obras del parking de Beniardá, en el que van a dejar toda la infraestructura instalada para el cobro futuro dependiendo de la ocupación”, ha alertado. “El modelo de ciudad del PP es claro: privatizar todo, hasta las calles, y recortar servicios mientras el alcalde sigue centrado en sus viajes, fotos y su promoción personal”, ha sentenciado Escoda.