ALICANTE. La negociación política emprendida entre el equipo de gobierno, del Partido Popular (PP) y Esquerra Unida Podem con la que se pretende desbloquear la revisión de la tasa de la basura en Alicante queda sujeta a la firma de un pacto por escrito en el que se reflejen los compromisos abordados entre las dos formaciones por lo que respecta a la progresividad del importe de los recibos ajustada al nivel de renta y en lo que atañe a la incorporación de propuestas de inversión concretas que deben quedar recogidas en los presupuestos municipales de 2025.
Esas son, al menos, las condiciones que se pusieron sobre la mesa durante el desenlace de dos reuniones distintas celebradas este lunes: una entre los representantes del grupo municipal de Esquerra Unida Podem con el concejal de Hacienda, Toni Gallego, y otra en el seno del consejo político de EU, como órgano de dirección del primer pilar de los tres que constituyen la coalición.
En realidad, los criterios de progresividad que deberían introducirse en la ordenanza fiscal reguladora de la tasa de residuos no habrían sufrido variaciones respecto a los dos encuentros previos celebrados entre ambas formaciones políticas. Se incluye la rebaja de un 16% en los importes a abonar por las viviendas que disponen de menor capacidad económica, con el consiguiente incremento de repercusión para los propietarios de inmuebles de mayor tamaño y valor catastral. También se incluye la creación de un cuarto tramo (en lugar de los tres previstos en la propuesta inicial) en lo que respecta a las categorías de vivienda por tamaño y valor catastral para propiciar esa mayor progresividad fiscal.
Esas dos medidas principales se complementarían con una rebaja en el importe del Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) que se aplicaría, igualmente, sobre los ciudadanos con el nivel de renta más baja, y con el aumento de los recibos de ese mismo impuesto que deberían abonar las viviendas encuadradas en bloques de apartamentos turísticos.