ELCHE. El pleno ilicitano orbitó en torno a varios puntos de posibles proyectos nuevos —el aparcamiento robotizado, una rotonda u otra solución para evitar los atascos en el polígono de Carrús o una sede del IVIA—, y también de polémicas. Esto último por la comparecencia de la edil de Mayores, Puri Vives, a propuesta de la oposición, para dar cuenta de la gestión en las residencias por la covid-19. Sobre todo de la Residencia de Altabix. Parte de la oposición considera que el Ayuntamiento podría haber evitado la grave situación y la concejal incidió en que la competencia es autonómica.
Desde el Partido Popular, que ya advertían que Vives "no puede escudarse en las competencias", preguntó qué papel había jugado la concejal, coordinación o gestiones, incidiendo en la falta de personal y medios de al concesionaria desde hace tiempo, planteando entre otras cuestiones, por qué no se hicieron PCR a todos tras la alarma del primer contagio y por qué no se presionó a la Conselleria para que actuara antes y de forma más contundente. Recapitulando que el Síndic de Greuges hizo un duro informe sobre la situación de la misma. Desde Vox también enfatizaron en la suciedad de la residencia, los traslados tardíos a otros centros o la falta de medios de la plantilla.
Por su parte, Vives se apoyó en que la competencia es autonómica, cosa que recalcó, para después enumerar las medidas que tomó la conselleria de Sanitat, además del reparto de medios que se hizo desde el Consistorio, o la reclamación del alcalde a la misma para intervenir. Por su parte, Loli Serna y Aurora Rodil consideran que se tendría que haber presionado más. La primera pidió su dimisión y la segunda planteó que si se iban a depurar responsabilidades. También intervino la edil de Ciudadanos Eva Crisol para aseverar que no vale escudarse en la competencia y que tanto ella como el regidor Carlos González deberían haber agarrado el toro por los cuernos.