ALICANTE. Quienes buscan escapar del calor no siempre se refugian en el aire acondicionado. También lo hacen quienes siguen senderos entre pinares, barrancos, acantilados y fuentes que aún brotan frescas.
En la provincia de Alicante, tan asociada al turismo de sol y playa, existe una red de rutas que parecen hechas para caminar sin prisa, escuchar lo que no suena en la ciudad y dejar que la naturaleza marque el ritmo.
Paseo ecológico de Benissa: sendero entre acantilados
- El paseo ecológico, en Benissa -
Cerca del mar, pero lejos del bullicio, el paseo ecológico de Benissa es un recorrido corto —unos 4 kilómetros entre ida y vuelta— que une varias calas entre roca y vegetación mediterránea.
Su ambiente tranquilo y natural lo convierte en un paseo ideal para familias, con bancos para reposar, carteles informativos y accesos al mar. Debido a que ya es bastante conocido, conviene recorrerlo a primera o última hora del día. Y lo mejor: si llevas calzado apropiado, una toalla y gafas de buceo, puedes ir bañándote en sus más de cinco calas de postal: L'Advocat, La Llobella, Pinets, La Fustera y Les Bassetes. Un poco más hacia Moraira se encuentra el Baladrar, otra cala a destacar.
Sierra de Bèrnia y el Forat (Xaló / Altea / Callosa d'En Sarrià / Benissa)
- El Forat de Bèrnia -
Considerada una de las rutas más espectaculares de la provincia, se accede desde la zona de Altea, Benissa o Xaló y asciende por un sendero de montaña hasta alcanzar el Forat, una cavidad natural que atraviesa la sierra como si fuera un túnel.
Al cruzarla, se abre una panorámica imponente del litoral, desde Calp hasta Benidorm. Se trata de una ruta circular de unos 8 km, con tramos de roca y pendiente que requieren calzado adecuado y un mínimo de experiencia, debido a su desnivel.
Ruta del castillo de Guadalest y embalse
- El Castell de Guadalest. -
El Castell de Guadalest es uno de los pueblos más visitados del interior de Alicante, pero desde allí parte también una ruta que bordea el embalse.
El camino es casi llano, ideal para caminar en familia, con vistas al agua turquesa rodeada de montañas. Puede recorrerse en un tramo corto o completarse en una vuelta de unos 9-10 km.
La Vía Verde del Serpis (desde L’Orxa)
- Uno de los túneles, entre L'Orxa y Villalonga.
El antiguo trazado ferroviario que unía L’Orxa y Villalonga se ha convertido en una vía verde que sigue el curso del río Serpis. Es un camino prácticamente llano, con túneles, pasarelas y rincones fluviales que invitan al silencio.
Apto también para bicicleta, resulta recomendable llevar frontal para los túneles, aunque son cortos.
Penya Migjorn (Xixona): subida con vistas
- La Penya Migjorn.
Exigente, pero muy gratificante, la ruta a la Penya Migjorn recorre unos 10 km (ida y vuelta) y ofrece vistas panorámicas del interior, tramos de roca y bosque mediterráneo. Requiere preparación física y se recomienda evitarla en días de más calor.
El sendero de los miradores del Maigmó (Tibi)
- El Maigmó -
Entre Alicante y Agost se alza la sierra del Maigmó, coronada por su cima homónima. El PR-CV 29 recorre el sendero de los miradores, con zonas señalizadas que permiten contemplar el valle del Vinalopó y, en días claros, incluso la costa.
Con más de 1.200 metros de altitud, no es un paseo fácil, pero sí muy recompensante, que después puede coronarse en algún bar o restaurante en Tibi.
El Hondo (Elche-Crevillent): humedales y aves
- El paraje del Hondo.
El Baix Vinalopó también tiene tesoros naturales. El Parque Natural de El Hondo ofrece rutas sencillas y llanas entre lagunas y carrizales, con miradores desde los que avistar flamencos, garzas o águilas.
Es un plan perfecto para familias y aficionados a la fotografía de naturaleza, con diversas rutas y zonas agrestes, estupendas para senderismo o para realizar paseos en bicicleta.
La Cova Tallada (Dénia/Xàbia): sendero y mar
- La Cova Tallada -
Entre Dénia y Xàbia se encuentra la Cova Tallada, una cavidad monumental bañada por el mar y que sorprende por su tamaño y sus dimensiones interiores, además de su fauna marina (y también humana, con el móvil en ristre para instagramear el momento).
Para llegar, se sigue un sendero costero con tramos de roca que desemboca en la cueva, medio natural y medio tallada por el hombre. El acceso está regulado en verano y requiere inscripción previa.
Cap d’Or (Teulada Moraira): mirador al Mediterráneo
- La imponente Torre de l'Or, en Teulada-Moraira.
Situados en Teulada-Moraira y tras ascender por la playa del Portet, se sitúa una ruta corta que parte de un punto muy concreto.
Como información de servicio, es recomendable patearse las calles Puerto Lápice, luego Puerto del Sol y Puerto de Alcúdia, hasta llegar al punto donde se toma el sendero en plena montaña y se asciende hasta la torre vigía del Cap d’Or.
Desde allí se contempla una panorámica de 360 grados: el Peñón de Ifach, la bahía de Moraira, la costa de Xàbia y, en días despejados, hasta Ibiza. Ideal para una excursión al atardecer.
Els Tolls de Vall d’Ebo: pozas de agua cristalina
- Els Tolls, en La Vall d'Ebo.
El río Girona ha formado en Vall d’Ebo pozas y pequeñas cascadas rodeadas de roca caliza. Hay senderos sencillos que permiten acceder a este entorno, muy frecuentado en verano como alternativa natural a la playa.
Conviene llevar calzado adecuado para el agua y extremar el cuidado del entorno, que años atrás sufrió un duro incendio forestal. Igual de recomendable, degustar la cocina de esta localidad y disfrutar de la tranquilidad del entorno.
Ruta de la Serra del Sit (Petrer)
- La Sierra del Sit.
En Petrer, la Serra del Sit ofrece varios itinerarios circulares con vistas al castillo, al valle del Medio Vinalopó y a la sierra del Cid.
Con tramos de roca caliza y aire de sierra pura, es una ruta ideal para quienes buscan una experiencia más completa.
Consejos para disfrutar del senderismo alicantino
Para disfrutar de estas rutas conviene evitar las horas centrales del día, especialmente en verano, y llevar siempre agua suficiente y algún alimento energético.
El calzado adecuado es imprescindible, dado que muchos senderos tienen tramos de piedra o desnivel, y también resulta recomendable consultar la previsión meteorológica, ya que las tormentas y el viento fuerte pueden añadir riesgos. Por último, la regla básica es no dejar rastro: llevarse la basura y respetar la flora y fauna local.
Caminar por la provincia de Alicante es también una forma de viajar. Este artículo recoge solo una primera muestra de la riqueza senderista del territorio. Quedan pendientes muchos rincones que aparecerán en próximas entregas, porque practicamente casi cada pueblo alicantino atesora un sendero que merece la pena recorrer.
