ELCHE. Tras el desalojo repentino en la medianoche de este miércoles de 61 vecinos en San Antón, por el corrimiento de tierras provocado por las lluvias en uno de los bloques, el Consistorio se encuentra desde primera hora de la mañana inspeccionando los restantes 11 edificios antiguos del barrio, con arquitectos e ingenieros del departamento de Urbanismo. Se han desalojado dos escaleras del bloque número 8, la 5 y la 3, y no se descarta que se desalojen las otras dos tras las revisiones de esta mañana, que podrían ser unas veinte viviendas. Paralelamente, el Ayuntamiento juega a varias bandas: va a declarar 'ruina inminente' los cuatro edificios de la primera fase a demoler para poder acelerar el proceso, y así disponer de los solares sobre los que se levantarán nuevos edificios. Ya se ha contactado con el Gobierno central y Generalitat para desbloquear las siguientes fases.
A la situación se llegó anoche sobre las 22:00 horas, cuando una vecina de este bloque 8 de la calle Palombar avisó al Ayuntamiento porque una de las grietas del edificio se había ensanchado de forma considerable. Al poco fue un técnico de Urbanismo de guardia con la Policía Local para avisar a los vecinos, y tras la inspección de la misma y de la caja de la escalera, en poco más de media hora decidió optar por el desalojo, cuestión que el alcalde Pablo Ruz ha destacado por ser resolutivo: "Hay que tomar decisiones". A partir de ahí, sobre las 00:30 horas concluyó el mismo, con el desalojo de 25 viviendas, aunque algunas estaban vacías. Con calma, 35 de los vecinos se han ubicado en un hotel a la entrada de la ciudad, con mediación del Ayuntamiento y personal municipal para su atención, y unas 20 familias están en casa de familiares, algunas de ellas en hospital por movilidad reducida. En total, 44 adultos y 17 menores. Según ha explicado Ruz, "hay desplazamiento de tabiques, que forman parte de la estructura", agregando que el estado del suelo tiene problemas de consistencia.
Inspección de todos los bloques
Tras una noche intensa, en la mañana de este jueves, en una reunión a primera hora con la asociación vecinal, el equipo de gobierno y técnicos municipales de Pimesa se ha ordenado la inspección de todos los bloques salvo los cuatro que ya está previsto derribar. Unas seis personas de Urbanismo están en el barrio desde las 9:30 horas junto a la asociación vecinal para ver posibles patologías y más signos como el de la grieta de este miércoles. Asimismo, sobre esos cuatro inmuebles, como ha venido contando Plaza, hay dos edificios al menos que ya están vacíos, pero Pimesa no puede disponer de ellos porque algún caso está en vía judicial, cuestiones a resolver en el juzgado por las expropiaciones o asuntos burocráticos entre banco e hipotecas pendientes.

- Reunión de vecinos de San Antón, Ayuntamiento y Pimesa. -
- AP
Agilizar el derribo de los edificios vacíos
Con la declaración de situación de 'ruina inminente', el Ayuntamiento espera poder agilizar ya este procedimiento, que ya lleva meses sobre la mesa a la espera de las distintas resoluciones legales. Aunque lleven tiempo vacíos. De hecho, alguno de estos casos a resolver ya tiene al inquilino en uno de los nuevos edificios con alquiler social.
Paralelamente, la edil de Acción Social, Celia Lastra, indica que están viendo con Patrimonio del Ayuntamiento las viviendas vacías disponibles para dar alojamiento a estos vecinos del bloque 8, inmueble que estaba fuera de la fase actual de renovación. Las 25 familias tendrían a disposición, a priori, 14 pisos de Pimesa de otros edificios en otros barrios, 10 del nuevo bloque 4, 6 de la Generalitat Valenciana que pondrá a disposición, y algunas viviendas de los tres primeros edificios construidos en el barrio, pero que hay que revisar.
Desbloquear siguientes fases de renovación
Por último, Ruz ha contactado este jueves con el subdelegado del Gobierno en Alicante, Juan Antonio Nieves, para que interceda con el Ministerio. "Necesitamos ya el Plan Estatal de Vivienda para las siguientes fases", indica el regidor, añadiendo que aunque hay predisposición, "no hay Presupuestos Generales". Este viernes acudirá a Elche también el Secretario autonómico de Vivienda, Sebastián Fernández. El objetivo es avanzar cuanto antes en las siguientes fases de renovación del barrio, que implica a las tres administraciones, y a los propios vecinos con su parte, con el pago de la diferencia entre las viejas y las nuevas casas. Recuerda Ruz que "tenemos ya redactado el proyecto para un nuevo inmueble de 45 viviendas", que ya se adjudicó. Y pone la pelota sobre el tejado del Ejecutivo central, negando que la responsabilidad sea de la Generalitat.
Eso sí, a día de hoy aún quedan dos tercios de las viviendas por construir para renovar todo el barrio. Se han construido alrededor de 300 de las 700 viviendas necesarias. Por su parte, la presidenta de la Asociación de Vecinos, María Ángeles López, ha agradecido la actuación municipal, pero ha insistido en que "nos tienen que hacer caso ya, no podemos estar esperando a que se tenga que desalojar un edificio entero".