ELCHE. Que un drama sacrolírico como el Misteri d’Elx tenga más de cinco siglos de vida y casi ininterrumpida celebración, gracias a su comunidad portadora (desde el clero inicialmente hasta la sociedad en general), implica que la potencialidad de investigación, especialmente con las técnicas actuales, puede ser en cierta forma casi inabarcable. Aún hoy hasta nuestros días, la cantidad de variantes y ámbitos de lo más concretos, incluso en aquellas cuestiones más sutiles, sigue arrojando nuevos conocimientos. En las recientes décadas, gracias a una mayor conciencia de salvaguarda, estas labores han permitido ir atesorando parte física de esa historia.
Para conocer más, una de las visitas obligadas es a los archivos y bibliotecas. En este caso, en el archivo de la basílica de Santa María, hogar de la Festa, se encuentra el documento más antiguo que hace referencia al drama asuncionista, y por tanto, la constatación de que tiene más de quinientos años de historia. Es el testamento de una integrante de la nobleza local, Isabel Caro, datado el 9 de julio de 1523. El testamento fue hallado en 1987 por la documentalista Anna Álvarez y por Joan Castaño, historiador y archivero de Santa María, que lleva realizando esta labor desde 1982. Hay dos copias del mismo, una en el Museu de la Mare de Déu de L’Assumpció y otra en el Museu de la Festa.
Otros documentos relacionados con la Festa que están en el archivo de la basílica son por ejemplo libros de fábrica donde se llevaba la contabilidad de la parroquia, donde están reflejados los salarios del sacristán, pero también aparecen los del Mestre de Capella, del organista, de los cantores… Libros del siglo XVIII, con algunos ejemplares que cifran los emolumentos desde el año 1719. Hay que recordar que previo a la desamortización, el Misteri contaba con cantores profesionales.

- Joan Castaño en el archivo de la basílica -
- FOTO: Pepe Olivares
«Es parte de la documentación administrativa de la iglesia que había quedado medio abandonada después de la desamortización del siglo XIX», explica el archivero, Joan Castaño, añadiendo que se le dejó de hacer caso hasta que se empezaron a hacer labores de documentación y recuperación en el siglo XX. Otras referencias en libros de fábrica, que no documentos específicos sobre el Misteri, que hay en el archivo de la basílica, referencian por ejemplo problemas que hubo de caídas de cascotes sobre 1670 desde la trapa del cielo por donde bajaba el Ángel. Entonces en la nave central, en época del templo anterior a la actual Santa María, el renacentista.
Otros hablan de fórmulas de financiación desde la basílica para sufragar el Misteri. Por cada caldera de jabón que se hacía en la Vila, generalmente los domingos, para la lucerna para iluminar a la Virgen (entonces en la ermita de San Sebastià), se destinaba una arroba de aceite, y parte se vendía para financiar la Festa. «Se pagaba, por ejemplo a los cantores, o cuestiones de la tramoya; algunos inventarios del siglo XVI muy interesantes hablan también de financiar el Núvol (hoy más conocido como la Mangrana)».
Un archivo con valiosa documentación
En total, el archivo de Santa María cuenta con unos dos mil ochocientos documentos, siendo lo más antiguo el fragmento de un misal que debe ser del siglo XIII, y después hay un libro de cláusulas que es una copia del siglo XV, pero que recoge información del siglo XIII, de gente que había muerto y dejó en el testamento cosas para la parroquia.
Precisamente, otros documentos muy frecuentes que guarda la basílica son de testamentos que la gente dejaba para las misas, administración de fincas… «Hay mucha información de la actividad económica de la parroquia, y después libros de fábrica, de reuniones del clero, etcétera», señala Castaño. También hay un libro sobre la gestión de los hilos de agua que eran propiedad eclesiástica.
Una labor de archivo que sobre todo empieza en la posguerra, en los años cincuenta, cuando se nombra como archivero a Juan Gómez Brufal. La basílica había conservado una parte de libros sacramentales, bautizos o matrimonios que se perdieron durante la Guerra Civil. «Creemos que no se quemaron, pero seguramente se tirarían después». Hoy, Santa María, igual que el resto de iglesias de la diócesis, está en un proceso de digitalización de su archivo desde 2021, en un plan impulsado por el obispado y que se puede consultar en el archivo diocesano.

- Libro de fábrica con salarios del Misteri del siglo XVIII -
- FOTO: Pepe Olivares
Las consuetas, en el Archivo Municipal
Por otra parte, para consultar otros de los documentos históricos del Misteri d’Elx hay que desplazarse al Archivo Municipal. Entre sus miles de documentos hay dos consuetas del Misteri d’Elx. La más antigua es de 1709 que incluye partituras, con las antiguas tapas sueltas, ya que el libro se restauró. Y otra de 1751, copiada por Carlos Tárrega que lleva instrucciones para las representaciones; sin música pero con la letra. Se consiguió en 2021 gracias a la importante donación de José María Ruiz Vicente, familiar de José María Ruiz de Lope Pérez, archivero municipal y bibliotecario en la segunda mitad del siglo XIX.