Faltan camareros. Lo habrán oído mil veces. Es una reclamación que no sólo afecta a la hostelería. Posiblemente nos encontramos con algo muy estructural. Ahora el foco está puesto en los bares, y el pasado miércoles, un grupo de directores de hotel, también lo puso en el sector del alojamiento: no sólo hay dificultades por captar personal, si no también en motivar al personal que ha trabajado en los hoteles y que ahora los establecimientos se han dado cuenta de que es necesario retener talento en las empresas, incluidas aquellas que tienen un modelo de negocio más básico.
Del sector hotelero está casi todo dicho. Sólo es necesario que entre un elemento nuevo -llámese tasa o kelly- para que los cimientos se polaricen. No suele existir término medio. El turismo suele ser el sector del que todos se apuntan los tantos del éxito (sólo hace falta que salga el sol), pero qué pocos abundan -públicamente- en los que proponen mejoras para que las piezas de ese engranaje funcionen mejor. Ya se sabe: si introduces elementos de mejora o de debate, eres el demonio; si empujas la rueda -aunque genere llagas en las pieles del entorno- eres el mejor. Cualquier imprevisto suele tener un culpable -y, por desgracia- un carné. Los grises no existen.
El miércoles, en Benidorm, hubo un debate entre los directores del hotel de la ciudad. Según describe la compañera Alba Mercader, la conclusión fue clara: o el sector no hace esfuerzos por ofrecer unas mejores condiciones laborales o de motivación, los establecimientos se pueden encontrar en los próximos años como ahora los bares y los restaurantes. La reflexión no es baladí: si escuchas a los que analizan la futura generación el escenario es todavía más sombrío: sólo quieren empleos de 8 a 15 horas. Ante tal panorama, la cosa aún pinta peor.
Los directores no plantearon nada que no pase en otros sectores. Sin ir más lejos, hay una parte de la industria de la provincia de Alicante que tiene el mismo dilema, le falta encontrar a personal formado, y además se topan con el mismo obstáculo: retener al personal que moldean y que tiene talento.