ELCHE. Por segunda vez en escasos dos años, a la Basílica de Santa María se le han vuelto a desprender cascotes de la fachada debido al mal estado de la piedra, que como se ve desde hace años, las distintas aristas de la basílica yacen con redes para proteger ante posibles desprendimientos. Fue el pasado viernes cuando se desprendió un cascote de la portada de San Juan, como ya pasara en 2019 por una de las mascletaes encima del MAHE. Así que desde el mencionado viernes, la zona está acordonada y el Obispado planea cambiar la red de protección de esta fachada.
A este respecto, de momento lo que se va a hacer desde el Obispado de Orihuela-Alicante es cambiar esta red, que está obsoleta y que lleva 15-20 años en esta parte del inmueble, una de las joyas patrimoniales de la ciudad y lugar de la representación del Misteri d'Elx. Asimismo, no solo se va a renovar esta red, sino que se van a colocar unos testigos para comprobar los movimientos que se puedan dar y de esta forma controlar las fisuras. Una actuación básica en estas situaciones. Al tiempo, el martes los bomberos estuvieron en la basílica retirando con una grúa el material que está suelto en la parte superior de la cornisa de la portada de San Juan de la que se cayó el cascote.