ALICANTE. Cambio de rumbo en la explotación, acompañado de reforma del entorno. Esa es la filosofía que pretende imprimir el equipo de gobierno de Alicante, del Partido Popular (PP), sobre la gestión del aparcamiento municipal de la Plaza de la Muntanyeta: una de las principales infraestructuras públicas que facilitan el estacionamiento en el centro de la ciudad, provista de 327 plazas. El departamento de Movilidad trabaja en la elaboración de las bases del concurso con el que se concertará la búsqueda de un nuevo concesionario, en las que se incluirá la obligación de acometer modificaciones internas en el edificio subterráneo con el propósito de facilitar el acceso de vehículos y reforzar la seguridad en sus recorridos internos.

Pero no solo eso. La convocatoria quedará ligada, también, a la realización de la reurbanización del espacio situado sobre el nivel de superficie: la propia Plaza de la Muntanyeta. Al menos, de parte de ella. Se trata de una actuación -que ya ha sido objeto de varios anuncios en los mandatos precedentes- con la que se pretende mejorar su configuración actual sobre dos parámetros concretos. Primero, la mejora de las condiciones de movilidad peatonal. Y segundo, la incorporación de una superficie de zona verde mayor de la que existe en la actualidad, según precisaron fuentes municipales consultadas.

El detalle de la intervención no se ha dado a conocer hasta el momento. Entre otros puntos, porque queda condicionado a las posibilidades que se recojan en el anteproyecto que se acaba de promover ahora, a través de un contrato menor por un importe de 17.908 euros (impuestos incluidos) que se concertó con el estudio de ingeniería A-Ingenia Research and Consulting SL el pasado mes de septiembre. Ese anteproyecto definirá tanto la remodelación del interior del aparcamiento, como las posibles opciones respecto a la distribución de espacios en su exterior, en cuanto a colocación de mobiliario, el desarrollo de nuevas zonas de jardín y a la disposición de pasos peatonales. De hecho, las últimas declaraciones de intenciones planteadas por el equipo de gobierno durante el pasado mandato (entonces, un bipartito compuesto por PP y Ciudadanos) aspiraban a ampliar el espacio peatonal del conjunto de la plaza.

Concurso previo

De ahí que tampoco se conozcan las condiciones económicas concretas por las que se prevé convocar ese futuro concurso de explotación y obra, a la espera de que se disponga del anteproyecto contratado hace dos meses. En principio, el lanzamiento de esa licitación no debería demorarse, ya que la gestión del aparcamiento se adjudicó en 2012 por un periodo inicial de once años que ya habría vencido. Este diario trató sin éxito de concretar si ese plazo se habría extendido mediante la concesión de una prórroga adicional.

Ese concurso previo se zanjó en favor de una alianza empresarial compuesta por Pavapark (del grupo Pavasal) y Autobuses Playa de San Juan (del grupo Vectalia). La suya fue la mejor oferta presentada, con un canon de 5.775.000 euros para el conjunto de la concesión, en una convocatoria en la que concurrieron otros cuatro licitadores: Continental Parking, Aceinsa Movilidad, New Capital 2.000 y otra UTE compuesta por Empark Aparcamientos y Servicios, Construcciones Moyua y GP Promoción del Suelo.

Ese último contrato precedente también incorporaba como requisito ineludible la realización de obras de reforma en el interior del estacionamiento, ya ejecutadas por su concesionario actual con el fin de mejorar su rampa de acceso y de incorporar nueva iluminación led, el sistema de pago por telepeaje, un sistema de guiado de plazas y la instalación de un nuevo circuito de cámaras de seguridad, además de la renovación de su ascensor. Esas modificaciones se acompañaron, también, de la remodelación de la configuración de la plaza, que quedó reinaugurada precisamente en el año 2012 con la instalación de nuevo mobiliario urbano, pérgolas para procurar sombra, espacios ajardinados y surtidores de agua en su extremo más próximo a la Plaza de Calvo Sotelo.