ALICANTE. Las expectativas del complejo cinematográfico de Ciudad de la Luz para 2025 se atisban más que halagüeñas. Tras un primer ejercicio completo de reactivación, en 2024, marcado por la llegada de rodajes como el de Venom, el último baile, a cargo de Columbia Pictures, o el de El Cautivo, como último proyecto del director español Alejandro Amenábar, entre los títulos más reconocibles, los platós de la partida de Aguamarga, en Alicante, albergan la posibilidad de colgar el cartel de completo con la llegada de un nuevo proyecto de uno los grandes estudios norteamericanos.
La Sociedad Proyectos para la Transformación Digital (SPTD), que continúa al frente de la gestión del complejo, se encuentra en plena fase de negociación para la captación de esa gran producción que llevará el sello de una de las cinco majors de la industria del cine: Universal, Paramount, Warner Bros., Disney y Sony. Las conversaciones se desarrollan con la máxima discreción, al quedar sujetas a cláusulas de confidencialidad, como sucede con casi todos los grandes proyectos del sector audiovisual. De ahí que no haya trascendido ningún detalle sobre la naturaleza del proyecto: ni género, ni reparto, ni argumento.
Con todo, la trascendencia de ese aterrizaje no solo reside en el peso específico de su productora. La confirmación de ese acuerdo resultaría especialmente singular en la medida en que supondría garantizar la ocupación del conjunto de las instalaciones de los estudios en lo que resta de 2025, lo que daría cuenta de la envergadura del rodaje en términos de necesidades de espacio. Por lo pronto, la planificación interna con la que trabaja la propia SPTD contempla que los trabajos asociados al desarrollo de ese proyecto puedan extenderse por todo un año completo, según pudo confirmar este diario.
De hecho, esa propuesta estaría condicionando, en cierto modo, el calendario para la llegada de otros proyectos, ya que el cierre de un acuerdo con ese gran estudio estadounidense podría conllevar que tuviesen que aplazarse otras propuestas paralelas que también estarían interesadas en recalar en los platós alicantinos para los que podrían no quedar platós disponibles. Al menos, no en cualquier fecha, lo que obligaría a cuadrar una programación secuenciada para que pudiesen concatenarse en el momento en el que esa gran producción en ciernes fuese liberando el uso de los estudios.
Gestión directa y nuevos servicios
El conjunto de esas negociaciones siguen recayendo en el equipo de dirección de la SPTD de forma directa, después de que, el pasado mayo, se desistiese del concurso concertado para concertar los servicios de un equipo interdisciplinar que asumiese las riendas de la gestión, promoción de los platós y captación de rodajes. Esa decisión se adoptó después de que el Tribunal Administrativo Central de Recursos Contractuales (TACRC) estimase parcialmente el recurso presentado por el grupo Secuoya frente al acuerdo de adjudicación de ese concurso en favor de MBS Ciudad de la Luz, al concluir que dicha empresa había concurrido a la licitación con una solvencia técnica prestada por otro operador (MBS Group).
La SPTD anunció entonces la convocatoria de un nuevo concurso en busca de otro gestor, aunque sujeto a condiciones distintas, después de haber calibrado las nuevas necesidades existentes en el complejo. Con todo, ese segundo proceso ha quedado orillado, sin que se contemple una posible convocatoria a corto o medio plazo, después de que se haya valorado los resultados obtenidos con un año de gestión directa. Ese balance deja la captación de hasta 14 rodajes que habrían deparado un impacto económico de 60 millones con el tirón de la ya citada tercera entrega de la saga Venom, además de otros largometrajes como Mala Influencia, de Chloé Wallace; Under Paris, dirigida por Xavier Gens o Los Tigres, de Alberto Rodríguez. A esos largometrajes, se sumaron los de las series La Ley del Mar, Nero, The Walking Dead: Daryl Dixon, Favatrix y Mar afuera. Todo ello al margen de rodajes de spots publicitarios.
De este modo, es la propia SPTD la que continúa pilotando la incorporación de nuevos serivicios y la provisión de nuevas infraestructuras para garantizar el mantenimiento y el correcto funcionamiento del complejo. De este modo, entre otras iniciativas, la planificación interna de la sociedad pública -adscrita a la Conselleria de Innovación, Industria y Turismo- incluye la próxima licitación de una planta fotovoltaica de 1000kwp de potencia que se instalaría en la cubierta de los edificios de los almacenes con el propósito de favorecer la producción de electricidad y abaratar consumos internos. En principio, el proyecto que debería salir a concurso en cuestión de semanas parte con un presupuesto de salida de más de un millón (1.171.922,82) en una convocatoria dividida en dos lotes: uno sobre la propia instalación fotovoltaica y otro sobre el equipamiento y gestión energética.