ALICANTE. Viendo la trayectoria del cocinero santjoaner Alberto Durá, cualquiera diría que está a punto de lograr algo importante para la provincia, como sería sumar una estrella Michelin o un sol Repsol a la alta cocina alicantina. Sin embargo, la humildad es su fuerte. Lo único que persigue es la estabilidad en un local en el que pueda dar rienda a suelta a su creatividad, pero sin salirse del camino tradicional tan valorado por su fiel clientela.
En el año y medio que lleva dirigiendo el restaurante del Club Náutico Marina Greenwich, en Altea, esa ha sido la tónica habitual. Buen producto, recetas de la terreta y un toque especial, donde entra en juego la mano del cocinero. El objetivo perseguido solo es "no fallar". Que quien vaya disfrute y repita. Sin más. Eso sí, apunta una referencia para el gran público. Él se caracteriza por sus 'arroces pensados'. Los de siempre, pero sorprendiendo sin frivolizar. Un concepto que explicará este sábado, a las 19:30 horas, en La Estación Mahou, donde será entrevistado para hacer un recorrido por su carrera en el mundo de la cocina.