ALICANTE. El pulso por la definición del modelo de libertad comercial que debe regir en la ciudad de Alicante continúa. La Concejalía de Comercio que dirige la socialista Gloria Vara insiste en la defensa del régimen de libre apertura en domingos y festivos sólo para la zona del Centro tradicional en los términos en los que se acordó en el Consejo Local de Comercio celebrado en octubre de 2016. Lo hace por medio de un nuevo escrito de oposición a la regulación planteada por la Dirección General de Comercio, el pasado julio, en la que acordó la implantación de un sistema estacional para toda la ciudad. Ese sistema, que es el que rige en la actualidad, plantea que puedan abrir todas las grandes superficies de la ciudad los domingos comprendidos entre el 15 de junio y el 15 de agosto, además del periodo de Semana Santa, en el caso del gran comercio situado en la fachada marítima.
El nuevo escrito de oposición municipal a ese régimen se acoge a la vía abierta por la Abogacía de la Generalitat, en un informe solicitado por la Secretaría Autonómica de Economía, que dirige Blanca Marín. En ese dictamen, la Abogacía confirmaba la validez del argumento técnico-jurídico utilizado por la Dirección General de Comercio para rechazar las pretensiones de la concejalía y descartaba la posibilidad de que el Ayuntamiento de Alicante pudiese presentar un recurso de alzada frente al decreto de regulación del Consell. En ese informe, se confirmaba que una administración no puede acudir a ese procedimiento frente a una decisión de otra administración. No obstante, la Abogacía sí contemplaba que el Ayuntamiento podía presentar un requerimiento.
Y ese es, en suma, el trámite que cumplimentó la Concejalía de Comercio hace dos meses (aunque no había trascendido hasta ahora). En ese requerimiento, el departamento municipal reitera los mismos argumentos que viene esgrimiendo hasta ahora para que se mantenga la Zona de Gran Afluencia Turística (ZGAT) del centro frente a la nueva regulación estacional del Consell. El escrito incide en que la nueva ZGAT pasa por alto determinados festivos y recalca que la Dirección General habría admitido la ZGAT del Centro, revisada y ajustada al cumplimiento de la sentencia en favor de tres centros comerciales (a los que se les reconocía el derecho a ser incorporados a una ZGAT), por silencio administrativo positivo (es decir, no haber contestado a la petición municipal y, en consecuencia, haberla aceptado de forma tácita).
En ese requerimiento, además, el Ayuntamiento defiende que, de acuerdo con el criterio de los servicios jurídicos municipales, la vía adecuada para oponerse al decreto del Consell sí era la del recurso de alzada, como la propia Dirección General de Comercio había considerado al darle traslado de su resolución.
La impugnación municipal decaerá si se pacta una nueva regulación asimétrica con situaciones diferenciadas para las ciudades de Alicante, València y el resto de la Comunitat como la que ultima la Conselleria de Economía
Este último requerimiento todavía no ha sido contestado por la Dirección General de Comercio, que tampoco ha resuelto los recursos de alzada presentados por los operadores comerciales (Anged, El Corte Inglés y los cuatro centros comerciales de Alicante). Cuando eso suceda, el Ayuntamiento (y también esos actores del sector) seguirá teniendo a su alcance la posibilidad de acudir a la jurisdicción contenciosa para presentar un recurso ante el Tribunal Superior de Justicia (TSJ) frente al decreto del Consell, en el supuesto de que se desestimen sus alegaciones. En ese escenario, todo parece indicar que, efectivamente, el Ayuntamiento interpondrá ese recurso. El alcalde, el socialista Gabriel Echávarri, y la edil de Comercio vienen insistiendo en esa dirección desde que se conoció la propuesta del Consell, pese a que esa posición no contaba con el respaldo de sus socios de Gobierno de Guanyar y Compromís. Ahora, con un gobierno del PSOE en solitario, nada parece apuntar que se vaya a cambiar de opinión.
En cualquier caso, cualquier iniciativa que gire en torno a ese modelo de ZGAT estacional ahora en vigor para la ciudad de Alicante podría perder todo su sentido en el caso de que acabe fraguando el acuerdo autonómico que sigue ultimando la Conselleria de Economía, con una propuesta de regulación asimétrica para las ciudades de València y Alicante. Si el Ayuntamiento no respaldase esa hipotética nueva regulación, tendría que iniciar otro proceso de impugnación frente a ella.