ALICANTE. Tercer intento en marcha. El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante, compuesto por Partido Popular (PP) y Ciudadanos (Cs), trata de acelerar la implantación de varias mejoras en el servicio de transporte público en autobús sin tener que esperar a que se adjudique el nuevo contrato. Entre esas mejoras figura la puesta en marcha de un sistema de microbuses lanzadera con los que se pretende ampliar las alternativas existentes para acceder al Castillo de Santa Bárbara: ahora limitadas al desplazamiento en vehículo privado (sin posibilidad de estacionar), en taxi o en VTC, o en el recorrido a pie, mientras perduren las restricciones sanitarias implantadas sobre el uso del ascensor desde el frente de El Postiguet.
El edil de Transportes, el popular Manuel Villar, ha precisado este martes, durante la comparecencia semanal para dar cuenta de los asuntos tratados en Junta de Gobierno, que su departamento ha vuelto a solicitar un informe a la oficina presupuestaria de la Concejalía de Hacienda para que se puedan habilitar los fondos necesarios para ofrecer ese nuevo servicio de lanzadera. Además, en esa petición se incluyen mejoras adicionales "demandadas por los vecinos" para que se pueda disponer del sistema de transporte bajo demanda hasta las partidas rurales, así como el refuerzo en las frecuencias hasta los polígonos industriales: otras dos de las mejoras incorporadas en el Proyecto de Servicio Público (PSP) que servirá de base para la nueva licitación del servicio. "Lo hemos solicitado ya en dos ocasiones anteriores y el departamento de Intervención ha respondido en las dos ocasiones que no resultaba viable al no existir disponibilidad de fondos para ello y que convenía esperar a que entrase en funcionamiento la nueva contrata", ha explicado.
De hecho, ha anticipado que "previsiblemente, la propuesta volverá a quedar desestimada de nuevo, pero nuestra intención es reiterar la petición también para que se incluya la consignación necesaria en la elaboración de los presupuestos de 2022", ha señalado. En principio, la incorporación de esos nuevos servicios requeriría de una provisión de un millón de euros. Y, según ha admitido Villar, tampoco existe garantía de que esa partida llegue a incluirse finalmente en las cuentas municipales del próximo año. "Probablemente sí podríamos acelerar la implantación de las lanzaderas si presentásemos la petición por separado, sin requerir fondos para el resto de mejoras, pero no consideramos adecuado obviar las demandas de los vecinos y seguimos apostando por reclamar fondos para todas las mejoras en su conjunto", ha añadido.
Por su parte, el portavoz del equipo de gobierno y edil de Cultura, Antonio Manresa, ha expresado su confianza en que la Conselleria de Sanidad fije nuevas condiciones en los protocolos de prevención de contagios frente al coronavirus y se permita volver a poner en funcionamiento el ascensor del Castillo, a partir del informe posterior que deba emitir el departamento municipal de Prevención de Riesgos Laborales. Hasta el momento, un informe de ese mismo servicio basado en las restricciones de Sanidad impide el funcionamiento del elevador, según fuentes municipales.
