El Ayuntamiento de Alcoy ha anunciado que se postula para lograr el título de Capitalidad Cultural Valenciana 2020/2021. Un sello anual creado por Cultura de la Generalitat el año 2016 con el objetivo de incentivar la vertebración de la cultura, que ha reconocido en la última ocasión a Altea y Vilafranca en las dos categorías existentes, una para municipios de más de 5.000 habitantes y otra para los de menos de 5.000.
En este caso, la capital de l’Alcoià quiere tomarle el relevo a Altea, localidad que, bajo el eslogan ‘Mar de cultures’ disfrutará de este reconocimiento hasta el 20 de abril de 2020. "En cierta forma, es un premio, al tratarse de un reconocimiento de ámbito social y regional, una puesta en valor del territorio". Así lo ha desvelado el concejal de Cultura de Alcoy, Raül Llopis. En la apuesta "clara" del equipo de Gobierno del que forma parte, el proyecto se ha presentado en el marco del recientemente activo Consejo local de Cultura, instando a la colaboración a las comisiones que lo integran. Un documento de 44 páginas que, desde el pasado 18 de diciembre, fecha límite de presentación de candidaturas, ya está siendo analizado por parte del equipo de técnicos competente la Generalitat.
"Es la segunda vez que Alcoy quiere entrar, pero la primera vez decidimos no decir nada, a modo de prueba". Llopis detalla que la propuesta se ha trazado en dos líneas diferenciadas. "Por una parte, la fertilidad cultural de la que goza la ciudad y que hemos querido potenciar, y las buenas prácticas en muchas de las áreas, apoyadas por nuestro gran tejido asociativo sociocultural local". La segunda piedra angular para que Alcoy se haga con la Capitalidad Cultural Valenciana remite a la proyección histórica de la que puede presumir –y así ha sido- el municipio. "Es básica y necesaria (…) Contamos con una sociedad y legado histórico, festivo y cultural que nos avala, además de ser patrimonio material e inmaterial a muchos niveles", reconoce el edil.
Llopis asegura que el Consejo de Cultura que se ha impulsado en esta legislatura es clave a la hora de "auditar" aspectos socioculturales con los que ya contaba la ciudad, pero que no se habían llegado a evaluar hasta ahora. "Alcoy es Ciudad Amiga de la Infancia desde 2018, y forma parte de la red de Ciudades Amigables con las Personas Mayores". El concejal destaca la "creación de espacios" socioculturales en los últimos años, como la sala de arte La Capella, instalada en el antiguo asilo, a la que se suma el ciclo expositivo realizado junto con la cátedra de Arte Contemporáneo Antoni Miró de la UA.
"Junto a estas novedades, no nos hemos olvidado mencionar nuestras tradiciones". En este sentido, destacar la marca paraguas creada para agrupar el teatro amateur que tanto ha caracterizado a la ciudad, TeatrAm; el éxito del Alcoy Modernista en septiembre; el veterano Premi de Teatre Ciutat d’Alcoi, con 45 años de trayectoria; y el impulso del talento de los más jóvenes a través de la Mostra de Teatre Escolar, en la feria de las ferias escénicas que este año celebrará del 25 al 28 de mayo sus treinta años de existencia. "Que distinguieran a Alcoy con la Capitalidad Cultural Valenciana sería perfecto en un año en que la ciudad acoge tantas efemérides, entre las subrayadas, los veinticinco años del fallecimiento de l’Ovidi". Para el concejal, por tanto, sería la culminación de un año "especial" después de "luchar" por la cultura. "Es difícil decidir, pero la verdad es que Alcoy ha sido, es y será punta de lanza en este sentido", sentencia.
El reconocimiento de la Generalitat busca una descentralización de la oferta cultural, mejorar las comunicaciones entre la Generalitat y los agentes culturales de todo el territorio valenciano y garantizar el acceso universal a la cultura, según se explica desde el organismo. Gandia ostentó la primera CCV entre 2017/2018. Con la incorporación de dos distinciones, una para municipios de más de 5.000 habitantes y otra para los de menos de 5.000 habitantes, Sagunt y Potries fueran las poblaciones que le siguieron y, desde el 25 de abril de 2019, son las anteriormente mencionadas Altea y Vilafranca, hasta la primavera del año entrante.