ALICANTE. La asociación ecologista Amigos de los Humedales del Sur de Alicante (AHSA) ha presentado alegaciones ante el Servicio Provincial de Costas al proyecto de rehabilitación del tramo sur de la Playa de San Juan, solicitando que el proyecto se reoriente a la restauración ecológica del entorno litoral afectado y rechazando la construcción de un espigón de 55 metros de longitud y 6 metros de anchura dentro del espacio marino protegido del Cabo de la Huerta, así como el aporte masivo de arena que plantea el proyecto (casi 12.000 metros cúbicos).
Los ecologistas rechazan de plano "la construcción de cualquier estructura artificial rígida en este tramo litoral, menos aún dentro del espacio marino protegido del Cabo de la Huerta (incluido en la Red Natura 2000), cuestionando la extracción de 44.000 metros cúbicos de áridos del yacimiento marino de Cullera por su impacto negativo sobre las comunidades biológicas asociadas a los fondos marinos afectados, así como el aporte de 12.000 metros cúbicos a la actual playa por sus posibles efectos negativos sobre las praderas de fanerógamas marinas del entorno por aumento de la turbidez del agua y por enterramiento", según informan portavoces del colectivo, a través de un comunicado.
AHSA plantea "remodular a la baja ese aporte de arena, incluso planteando que parte del tramo de playa a rehabilitar pueda tener una configuración no arenosa". También proponen en sus alegaciones "que se aproveche el proyecto para promover el desmantelamiento del colector de saneamiento que discurre bajo la playa, una estructura artificial que puede reubicarse bajo los viarios urbanos del Cabo de la Huerta, fuera del ámbito de influencia del oleaje marino, que consideran que será cada vez más invasivo y agresivo como consecuencia del cambio climático".
Por último, en sus aportaciones, plantean "que el proyecto contemple el desmantelamiento del relleno de escollera que se extiende entre la playa de San Juan y el Cabo de la Huerta, de modo que se promueva la recuperación de la morfología costera natural en este tramo costero, morfología apreciable tanto en el vuelo de Ruiz de Alda (1929-1930) como en el vuelo americano de 1956, además de en dos fotografías, tomadas en 1930, que aportan junto a sus alegaciones".
Portavoces de AHSA señalan, para concluir, que "la reorientación que se propone del proyecto supondría una mayor concordancia con la estrategia de la demarcación marina levantino-balear y con el objetivo general de las estrategias marinas de proteger y preservar el medio marino, incluyendo su biodiversidad, evitar su deterioro y recuperar los ecosistemas marinos en las zonas que se hayan visto afectadas negativamente".