ALMORADÍ. El lunes, la alcaldesa de Almoradí, María Gómez, le reclamaba de nuevo al president de la Comunitat, Ximo Puig, que saliera a licitación las obras de uno de los tramos del colector de aguas fluviales. La alcaldesa viene insistiendo en la importancia de estas obras desde hace años. El lunes se lo recordaba, en un corrillo informal, en el punto exacto donde hace dos años el muro de la mota del río Segura cedió, ahondando en la ya agresiva Dana. Puig visitaba la zona en el segundo aniversario de este fatídico acontecimiento. Gómez aprovechó para recalcar la necesidad de que esas obras se licitaran cuanto antes. Con una coincidencia asombrosa, ese mismo día la Conselleria de Agricultura, Desarrollo Rural y Emergencia Climática lo sacaba a licitación. A esta casualidad –según indica la Plataforma de Contratación del Sector Público la documentación se subió por la mañana- se le une que el proyecto está redactado desde noviembre de 2017.
Desde hace décadas, el municipio viene sufriendo la inadecuación de las dos vías de drenaje del casco urbano. En 2001, el Ayuntamietno encargó a la mercantil Cauce Proyectos y Obras S. A. la elaboración del estudio “Planeamiento de alternativas, valoración y priorización de actuaciones correctoras de inundaciones por escorrentía urbana de Almoradí”. Siete años después, en 2008, la antigua Conselleria de Medio Ambiente encargó a la misma mercantil el proyecto para la red de evacuación de aguas pluviales del colector principial, “El Calvario”. Este tramo comprenden desde la CV-935 (la carretera que conecta con Algorfa) a la urbanización El Bañet. En 2010 la conselleria adjudicó a la mercantil BM3 Obras y Servicios S. A. la ejecución del proyecto por un plazo de 15 meses. La empresa quebró y en 2011 se rescindió el contrato. No fue hasta 2016 cuando se vuelve a recoger en los presupuestos de la Generalitat una partida para estas obras. En noviembre de 2017, concluye la elaboración del nuevo proyecto y no ha sido hasta este lunes, cuando ha salido a licitación.
En cuanto al presupuesto destinado para estas obras, el proyecto lo cifra en 867.686 euros –IVA incluido- y un plazo de ejecución de seis meses. La actuación se dividirá en tres. Una de ellas será la construcción del colector principal de pluviales “El Calvario”. La segunda, el colector secundario de pluviales, desde la avenida de Algorfa a la calle Azarbe El Calvario y por último la reposición de las infraestructuras afectadas. Almoradí ya tiene dos tramos ejecutados, y tal como le expresó la alcaldesa a Puig, es imprescindible la ejecución de estas obras para continuar y culminar con el plan de una red de colectores que envuelva a todo el casco urbano, para evitar, como sucedió en las inundaciones de septiembre de 2019, el colapso y posterior rotura de la red de alcantarillado y saneamiento. Estas obras de reparación se adjudicaron a la mercantil Orthem por 4,3 millones de euros, 1,4 millones menos que el precio base de licitación.
La alcaldesa avanzó el lunes que van a solicitar a la Generalitat una subvención de un millón y medio de euros para concluir esa red de colectores. El objetivo es que las aguas pluviales se recojan en esta red y se encaucen hasta la depuradora, desde donde se canalizaría el agua por los distintos cauces que se dirigen al río Segura o la desembocadura.