José Luis Ábalos conversa en Alicante con Carlos GonzálezELCHE. Hablar de Elche y del AVE se ha convertido en un oxímoron durante los últimos años. Alrededor de una década es lo que se ha estado hablando sobre este proyecto, en el que el municipio ilicitano ha visto cómo reiteradamente los compromisos de los distintos gobiernos sobre la llegada de la Alta Velocidad a la ciudad quedaban en simples palabras y no en hechos. El último de esos compromisos llegó el martes en un desayuno de Cadena SER, con la visita a Alicante del ministro de Fomento, el socialista José Luis Ábalos. Como agua de mayo recibió el alcalde Carlos González la buena nueva: la conexión Elche – Madrid será una realidad en verano de 2019.
La recibió como agua de mayo, o al menos eso le tocó decir por protocolo ya que el Gobierno es del mismo color. Tras la moción de censura de Pedro Sánchez y el asiento en el poder de nuevo del PSOE, el tripartito estableció una batería de prioridades que esperaba que se acelerasen ahora que había una mayor sintonía con Madrid (mejoras en las infraestructuras ferroviarias, la llegada del AVE, la Dama de Elche…). Sin embargo, y nada más lejos de la realidad, lo cierto es que Fomento ha vuelto a retrasar la llegada de la línea de Alta Velocidad a la ciudad, algo que a estas alturas ya no sorprende, teniendo en cuenta el enésimo incumplimiento de los plazos.
De septiembre de 2018, algo a lo que se había comprometido Ábalos con la patronal en el mes de julio, a verano de 2019. Prácticamente un año más de espera. De poder realizar el viaje inaugural este mismo mes, a esperar a otro curso viendo el lento avance de la fase final de las obras que estarán finiquitadas —en teoría— en primavera. Un retraso con el que González dijo mostrarse satisfecho, hastiado de la “incertidumbre” y el incumplimiento de los plazos por parte del Ejecutivo de Mariano Rajoy: “el anuncio de Fomento sobre la llegada del AVE es muy positivo después de la incertidumbre generada por el anterior gobierno”, aseveró más concretamente.
Así pues, según sostuvo el primer edil, “ahora hay información precisa y un horizonte cierto de la entrada en funcionamiento del AVE”. Parece que ahora este sí se trata de un anuncio “con pilares sólidos”, aseveró el alcalde. “Ábalos nos ha dicho que la estación está finalizada en las próximas semanas y que las pruebas están también en su fase final por lo tanto creo que estamos en un horizonte que nos permite confiar en que la llegada del AVE a nuestra ciudad está próxima”, añadió González, tras haber celebrado en falso varias puestas en marcha del AVE desde que gobierna el Consistorio.
Palabras de compromiso y otras de agradecimiento que no son nuevas por parte de ambas administraciones, y que tampoco sorprenden. De hecho, el Partido Popular ya advirtió en julio que la línea se podía retrasar un año por lo comentado por el Delegado del Gobierno en Murcia en julio: al ceder el Gobierno con el soterramiento del AVE a su paso por la ciudad, las obras se tendrán que retrasar, lo que afecta ineludiblemente a Elche, ya que es la misma línea. De hecho, el funcionario murciano dijo en primer lugar 2020, aunque después matizó 2019. Ya entonces, el presidente del PP local Pablo Ruz exigió que González pidiera una reunión a Ábalos para abordar el asunto. Una reunión que ya estaba solicitada para exponerle al político de Torrent la situación de las conexiones en Elche —ferrocarril, Ronda Sur, A-7—, y que sigue sin concretarse. De momento, tuvo que contentarse con compartir unos instantes en el acto de Alicante con el político de Torrent para trasladarle brevemente algunas de estas cuestiones.
Como era de esperar, los de Ruz mostraron su enfado con el anuncio, defendiendo que el compromiso del PP era que la puesta en marcha fuera en 2018. Además, criticaron a González al considerar que fue muy cándido con esta nueva tesitura: “es muy preocupante que se dedique a loar a los ministros socialistas en vez de reclamar inversiones y reivindicar las necesidad de Elche. Primero están los intereses de la ciudad y luego las ambiciones personales de los políticos, que dada su situación tienen que mantener las sillas”. En ese sentido, recuerdan que además ese anuncio de que las obras acabarán en primavera, coincidirá de lleno con la campaña electoral o con las propias elecciones, lo que sin duda supone una buena imagen y una bala a favor de los socialistas. “Junto al AVE también reclamamos el compromiso sin fisuras por parte del Gobierno de la Nación y el Partido Socialista con la puesta en marcha del Plan de Cercanías aprobado por el anterior gobierno y consignado en los presupuestos Generales del Estado”, apostilla Ruz.
Así que, sea por cálculos electorales o porque la realidad de los plazos se ha impuesto una vez más a Renfe y al propio Ministerio, no se puede saber si hubiera llegado de seguir el Ejecutivo de Rajoy. En cualquier caso ahora ya no importa, la cuestión es si llegará finalmente el ansiado AVE a Elche en el verano de 2019 para poder romper un oxímoron que dura diez años.
