SAN VICENTE DEL RASPEIG. La Concejalía de Comercio e Industria ha proyectado la transformación del Centro de Empresas del Polígono Canastell en un espacio de coworking y formación para llenarlo de actividad empresarial y facilitar la implantación de negocios.
La intención de la Concejalía es crear, junto con el Vivero Municipal de Empresas que está emplazado junto al Centro de Empresas, un polo muy dinámico en el que las empresas puedan compartir espacios y sinergias, un espacio donde, además, se ofrezcan condiciones para abaratar costes a las personas emprendedoras en suministros, mantenimiento, limpieza…
En concreto se van ha habilitar unas zonas de coworking y formación, y en el Vivero de Empresas se van a instalar contadores individuales para las naves y los despachos. Asimismo se está proyectando el vallado y acondicionamiento de la zona exterior del Vivero de Empresas.
El concejal de Comercio e Industria, Alberto Beviá (EU), explica que se trata de proyectos que ya tienen consignación presupuestaria. Se va a invertir un total de 127.000 euros procedentes del dinero del remante de tesorería aprobado ya por el pleno municipal. A la creación del coworking y zona de formación se van a destinar 49.000 euros; a las obras de vallado y acondicionamiento de la zona ajardinada, 38.000, y a los contadores eléctricos del Vivero, un total de 40.000 euros.
Beviá ha recordado que el Vivero Municipal de Empresas se encuentra en este momento lleno de actividad, con todas las naves y despachos (salvo uno) ocupados y es un buen momento para crecer con la transformación del Centro de Empresas anexo.
Los espacios compartidos coworking reúnen profesionales autónomos, empresas y teletrabajadores de todo tipo, donde el gestor del espacio intenta crear oportunidades profesionales y personales entre los miembros, buscando puntos de conexión entre ellos. Los coworking van más allá de ser una mera oficina compartida con la que los profesionales tratan de ahorrar costes.