El secretario general del PSPV-PSOE, Ximo Puig, durante su intervención en el comitéVALENCIA. El secretario general del PSPV, Ximo Puig, expuso este jueves ante el comité nacional de su partido varios de los ejes de acción política que viene ejerciendo desde el Consell así como algunas reflexiones acerca del papel que debe representar la formación socialista en esta etapa de gobierno de coalición cimentado en el Pacto del Botánico. Pero no solo eso, el líder de los socialistas valencianos también defendió ante los suyos la necesidad de que el PSPV sea "un actor con una agenda propia dentro del socialismo español". Una afirmación apoyada en la reciente decisión de crear un carné propio para los socialistas valencianos y que llega en pleno proceso clave para el partido del puño y la rosa, con unas primarias a la vista que se antojan tensas y complicadas.
En cuanto a su discurso, abarcó diversas cuestiones pero giró precisamente en torno a la "buena salud" del Pacto del Botánico al que el PSPV llegó con Compromís y Podemos en su momento y que, apenas unas semanas atrás, se renovó tras un largo proceso de negociación. "Hemos enviado un potente mensaje de estabilidad y hemos conseguido disipar las dudas sobre la duración de este mandato", sentenció.
No obstante, Puig se preocupó de regar su intervención de frases dirigidas a incidir en el orgullo socialista. Una estrategia que, de alguna manera, se percibe como un objetivo de no permitir que Compromís, su socio en el Consell, ocupe su espacio: "Hoy, ninguno está haciendo más por el País Valencià que el PSPV", comentó en uno de los pasajes al hablar del Botánico o, al referirse al avance en materia de financiación: "Liderar la reivindicación de la financiación supone liderar un tema transversal a la política valenciana. Significa ocupar la centralidad política. Significa que el PSPV es el principal referente valencianista", afirmó Puig.
Además, el líder de los socialistas valencianos centró una parte importante de su intervención a la economía: "A los socialistas no nos da miedo hablar de economía. Sabemos que no hay redistribución sin crecimiento", recalcó, para añadir que la Comunitat Valenciana, según datos de la AIRef, viene creciendo "a un ritmo del 3,9%".
"La productividad, el mérito, el esfuerzo son conceptos profundamente de izquierdas porque es la forma de conseguir más empleo compatible con mejores salarios", explicó Puig, para subrayar que hay "casi 110.000 personas más trabajando" desde que se inició la legislatura: "Ha sido el mejor año en creación de empleo desde 2006", remarcó.
Además, Puig, tras alabar el objetivo cumplido de sacar adelante los Presupuestos de 2017, se detuvo especialmente en dos de sus acciones políticas más recientes. La primera, el Fondo de Cooperación Local, que cuenta "con recursos -140 millones- por primera vez en la historia". Aquí se detuvo el líder del PSPV para hacer un guiño a sus compañeros de Alicante lanzando una dura crítica a la diputación presidida por el popular César Sánchez, quien no ha entrado en esta colaboración: "Priva de la mitad de recursos a los ayuntamientos de la provincia. No han entendido nada, siguen haciendo politiqueo con el dinero público, cuando lo que hay que hacer es política. Política con mayúsculas, que es la que pone a las personas por delante de los intereses partidistas. Seguid reivindicándolo compañeros de Alicante, porque todo el PSPV está con vosotros", animó.
En cuanto a la segunda cuestión, Puig sacó pecho por el inicio del proceso para la reforma del sistema de financiación acordado en la Conferencia de Presidentes. "Hemos acabado con la invisibilidad de nuestra tierra. Ahora ya está el problema valenciano encima de la mesa", afirmó el líder del PSPV, quien auguró que queda "mucho trabajo" por delante que se hará "con el consenso de los firmantes del Botánico pero también del resto de partidos y agentes de la sociedad civil", sentenció.
Un discurso que, en la recta final, Puig centró en sintetizar el proyecto del PSPV que se desarrollará en la conferencia de febrero en tres pilares: igualdad, crecimiento y valencianismo, pero en el que también deslizó unas palabras de autocrítica: "Hemos de ofrecer respuestas especialmente entre aquellos que han dejado de confiar en nosotros en los últimos tiempos. Entre aquellos sectores profesionales, jóvenes, que ante la falta de soluciones han perdido parte de la confianza que tenían en nuestra sociedad democrática y en sus instituciones".
En cuanto a los turnos de palabra, las intervenciones fueron menos críticas de lo que algunos asistentes consultados por este diario esperaban. Así, tomaron la palabra entre otros el presidente de la FVMP y alcalde de Elda, Rubén Alfaro, el director general de Cooperación, Federico Buyolo, el alcalde de Elche, Carlos González y el histórico Vicent Garcés.
Además, el director territorial y exdiputado Adolf Sanmartín lamentó durante su intervención que personas con responsabilidad institucional se centren en cuitas internas para provecho propio en lugar de defender el trabajo de la Generalitat. Una línea similar en la que se pronunció el director general de la Agencia de Seguridad y Respuesta a las Emergencias, José María Ángel, quien fue crítico con el hecho de que se invierta poco tiempo en defender al Consell y mucho en incendiar los ánimos de la militancia.
Además, en el Comité Nacional se aprobaron dos resoluciones en las que se contempla, por una parte, el apoyo de los socialistas valencianos a las comarcas y municipios afectados por el temporal; así como poner "fin a la parálisis" del Gobierno de Rajoy ante el "drama" de los refugiados.
La magistrada apunta a irregularidades administrativas y al desequilibrio en la distribución del dinero, pero no aprecia ilícito penal
