ALICANTE (EFE/AP). La sede provisional del Instituto para la Memoria Democrática estará, a partir del verano, en la sede del Consell en la ciudad de Alicante, en la céntrica Casa de las Brujas, según ha anunciado este miércoles el president de la Generalitat, Ximo Puig. Minutos antes de reunirse con entidades de la memoria histórica en la Casa de las Brujas, ha señalado que antes del verano estará formalizada la constitución del instituto, cuya ley prevé que tenga sede en la ciudad de Alicante, como publicó Alicante Plaza el pasado mes de octubre.
En ese momento, el Consell todavía no había cerrado una ubicación concreta para asentar su sede y sólo se especulaba con la posibilidad de que compartiese dependencias con la delegación territorial de la Conselleria de Obras Públicas, en la confluencia entre las avenidas de Aguilera y Óscar Esplá. No obstante, como ha precisado Puig, esa posibilidad se habría descartado al optar por una ubicación provisional en la misma sede de la delegación del Consell para "simbolizar" que la recuperación de derechos se sitúa en el "centro de la política de la Generalitat".
Por su parte, la consellera de Justicia, Administración Pública, Reformas Democráticas y Libertades Públicas, Gabriela Bravo, ha puesto de manifiesto que, en las próximas semanas, se pondrá en marcha el contrato para la apertura de las fosas en las que está documentada la presencia de víctimas de la Guerra Civil. Ha recordado que la ley contempla que, a instancia de familiares o asociaciones, la Generalitat asumirá "todos los costes", para lo cual en el actual presupuesto hay una partida de 840.000 euros.
El edificio de la Casa de las Brujas, delegación del Consell en Alicante.Además, otro de los objetivos que estarán tutelados por el Instituto es la conformación del banco de ADN y de un listado de víctimas para, en colaboración con otras autonomías, permitir la identificación de las víctimas, que es "una de las reivindicaciones más importantes de los familiares" para poder enterrar a sus allegados "y llorar a antepasados".
La Generalitat también trabaja en el mapa de fosas, que ya está publicado en el Instituto Cartográfico, y se propone seguir implementando mecanismos necesarios para su publicidad.
