BENIDORM. El Bono Viaje de la Comunitat Valenciana ha arrancado con fuerza tanto para empresas como para la sociedad valenciana. La web se puso en funcionamiento el martes y llegó a colapsar debido al número de personas que estaban entrando a la vez. Pero no solo para pedir el descuento en sus reservas, las empresas turísticas que aún no estaban adheridas al programa también tenían que acceder a esa misma página para sumarse a la iniciativa. Algo que parece que hará la gran mayoría de alojamientos turísticos, según explicaron las diferentes asociaciones del sector a este diario.
El presidente de la patronal hotelera de la Comunitat Valenciana (Hosbec), Toni Mayor, cree que puede ser una buena medida para incentivar la demanda, que defiende que sigue estando, pero que hay que tratar de empujarla en una situación complicada como la que vive España. El empresario opina que la cuantía es "muy generosa" pero que "seguro que será bueno". Como se recordará, el máximo del importe de la ayuda será de 600 euros con una estancia mínima de dos noches.
Por todo ello, Mayor estima que la gran mayoría de hoteles que siguen abiertos optarán por incluirse en este programa por la facilidad que tiene para ellos y que no tenga ninguna carga adicional sobre el empresario. Es más, el hotel de su cadena que sigue abierto en Benidorm figura entre una de las opciones que entran dentro de alojamientos con el bono.
El bono lo ve como una opción más para aumentar el número de reservas en un invierno que se vislumbra complicado, también en turismo de interior y de ciudad, como València. Benidorm prevé quedarse con apenas 20 hoteles abiertos durante esta temporada baja, que irá variando en función de la demanda y la evolución de la crisis sanitaria, como ha ocurrido desde que comenzó la pandemia. En la actualidad, la ocupación después del puente ha estado en torno al 45%, pero el número de alojamiento es cada vez menor: quedaban para aquel entonces unos 23 hoteles abiertos.
En estos momentos, Benidorm se nutre de los pocos extranjeros que deciden viajar a pesar de las cuarentenas impuestas, pero sobre todo de familias españolas con niños pequeños, que todavía no tienen colegio, como así señaló el presidente de Hosbec.
Con todo, Mayor se mostró positivo con la iniciativa de Turisme, que apenas empezó a andar este martes y llegó a tener 600 peticiones por minuto, lo que da buena muestra de las intenciones de viaje de los valencianos. Así, el empresario cree que podrá ser una buena manera de testar la fórmula para poder ir mejorándola a partir de enero, que sacarán la segunda remesa de ayudas. Se refirió de este modo a uno de los asuntos que no termina de ser del todo aceptado por las agencias, que es que tengan que adelantar el dinero a los alojamientos para poder tramitar ellos las reservas como intermediarios. Algo que parece más complicado debido a la difícil situación económica que atraviesan estas empresas.
En el mismo sentido se manifestó el presidente de la asociación de apartamentos turísticos de la Comunidad Valenciana (Aptur), Miguel Ángel Sotillos, quien defendió que "es una iniciativa loable". Frente a la polémica desatada por los propietarios particulares de los pisos vacacionales, entiende que quieran estar dentro del programa, pero justificó que se quedaran fuera por el bien de controlar de manera más óptima todas las reservas en las distintas tipologías de alojamiento que ya existen de manera reglada como gestoras turísticas. "La administración tiene sus limitaciones", apostilló Sotillos.
"Los apartamentos turísticos tienen interés, están intentando adherirse", señalaba el presidente de Aptur, al tiempo que explicaba que por el momento algunos de sus asociados les habían comunicado que habían tenido problemas para rellenar el formulario para inscribirse porque se encontraban la web caída. Como se decía, tanto las empresas como los que pedían el bono tenían que acceder por la misma página.
Entre los flecos que encuentra en el sistema escogido, indicó que está que el cliente tenga que tener un certificado digital, algo que no está todavía totalmente extendido en la sociedad española. "Todos queríamos que fuera un poco más simple en esto, pero Abogacía de la Generalitat nos dijo que no", apuntó Sotillos. No obstante, encontraron la alternativa, que es que sea el propio alojamiento el que tramite el bono a aquellos que no tengan el certificado digital.
Otra de las modalidades de alojamiento que se beneficiarán de este bono son los campings. El presidente la Asociación de Campings de Alicante, Juan Delgado, explicó que en su sector también se inscribirán la mayoría de los que siguen abiertos. El empresario aplaudió que se pusiera en marcha una ayuda como esta, y manifestó que ya estaba teniendo a sus primeros clientes interesados en conseguirlo para volver a sus instalaciones. No obstante, como el resto de fuentes consultadas, también mostró sus dudas sobre el certificado digital y si éste podría ser un obstáculo para los turistas.
"Veremos al final a quién beneficiará", mencionó Delgado, en relación al tipo de establecimiento por el que se decantarán para hacer uso del bono, sabiendo que la cuantía es importante con las tarifas actuales y que podrían derivar en viajes a establecimientos más exclusivos.
Con todo, Delgado no cree que vaya ser una fórmula en la que se vayan a volcar los campings porque iban a mantenerse abiertos durante el invierno de igual modo. Así, recordaron que habían tenido una ocupación media de un 50%, acusando las restricciones impuestas por muchos de los países de los que se nutren sobre todo en la Costa Blanca. Aun así, señaló que casi la totalidad de sus clientes en la actualidad siguen siendo seniors europeos, aunque con estancias más cortas y no como era habitual, de tres a seis meses.