Humana, robot y el baile / ROS FILM FESTIVALALICANTE. La tecnología, esa extranjera que emigró del país de los algoritmos y que no solo se ha integrado en nuestra sociedad moderna, sino que nos ha cambiado (o impuesto, usen la palabra que deseen) las costumbres. Pero no la odien, no sin antes reflexionar: ¿Estamos sometidos a ella por obligación o por propia voluntad? Recen a San Internet desde la iglesia de la tablet o la mezquita de sus móviles porque los robots y la Inteligencia Artificial no es que provengan de un país distinto, es que se consideran de otro planeta y ya están aterrizando en nuestro día a día en forma de asistentes personales con nombres como el de Siri, Alexa o Cortana. Para todas aquellas personas que lejos de temerles sientan curiosidad, este viernes y sábado, 7 y 8 de junio, estos entes tecnológicos tienen planeado invadir la Metro Dance Club, debido a su 28 aniversario, un cumpleaños dentro del cual la discoteca organiza la II edición de Metrolab, "un evento que intenta salirse de la escena puramente lúdica y apuesta por la cultura y por propuestas más vanguardista. La parte de ocio la tiene bien definida, pero la cultural es la que se quiere trabajar más", expone Fran Romera, encargado de la parte artística del proyecto We are the Robots.
Dentro de Metrolab se van a proyectar distintos trabajos audiovisuales relacionados con la robótica y también se llevarán a cabo varias sesiones de música en directo. Este fin de semana electrónico lo inaugura "Ensolab, el viernes 7, con una propuesta de documentales sobre la música electrónica", mientras que el sábado 8 se proyectarán los cortometrajes finalistas de la primera y la segunda edición del Ros Film Festival, un evento en torno al cine robótico que amplió su oferta artística el pasado 2018, con la creación de We are the Robots, una especie de spin off donde tienen cabida tanto el audiovisual como la música electrónica o la formación siempre relacionada con la robótica: "Gerenamos un paraguas que se llama We are the Robot, donde se incluyen distintos eventos y uno de ellos es el Ros Film Festival", explica Romera.
Este evento de cine de temática robótica nació en marzo de 2017, al que siguió una segunda celebración en septiembre de 2018: "En la primera edición se presentaron 56 cortos de 16 países y en la segunda fueron 193 de más de 30 países", recuerda el impulsor de este proyecto, Ricardo Domínguez. Con esta cantidad, unos 50 audiovisuales han sido los seleccionados para proyectarse el sábado, "16 cortos de la primera edición y 32 de la segunda", matiza, clasificados bajo las dos secciones que se proponen en el propio evento: "Real Robots, que son robots de verdad, electrónicos y programables, y Fictional Robots, que son robots de cine, es decir, animación, marionetas, robots con apariencia humana (como el de Blade Runner) o Inteligencia Artificial que habla (como Hal9000 en 2001)", apunta la diferencia entre ambas categorías.
Un ambiente distinto al que tiene acostumbrados la Metro, un club conocido también fuera de las fronteras de Alicante, donde la electrónica nunca ha faltado, ahora ya no solo musicalmente hablando, por lo que no resulta tan divergente la propuesta de colaboración entre la discoteca y estos proyectos audiovisuales y robóticos. "Hemos generado una zona de cine en la entrada que se llama Metrolab Proyecta y constituye la apuesta sobre la aportación del cine al evento del aniversario", comenta Romera. Sin embargo, el sábado no reinarán completamente los cortometrajes del Ros Film Festival, ya que también tendrá cabida para el pseudo documental de Las pirámides murcianas, un audiovisual "entre la ciencia ficción y el humor, que está relacionado con la música electrónica porque su director es productor de la misma, por lo que aparte del visionado de la película cuando la lleva por las ciudades también genera un evento alrededor del corto: los artistas locales del lugar al que se lleva el audiovisual interpretan los temas que se escuchan en el documental", cuenta el integrante de We are the Robots.
Como adelanto a un evento que también se llevará a cabo dentro de este proyecto -We are the robots-, Romera revela que en noviembre van a crear todo un abanico artístico en torno a la película Blade Runner y su primer fotograma, ese en el que se anticipaba Noviembre, 2019, Los Ángeles, por lo que "ese mes vamos a recrear el mundo de la película a través de distintas manifestaciones culturales, como "artistas plásticos que creen una obra con fotogramas de la película, proyecciones de la misma con música electrónica en directo, etc.".
En el imaginario colectivo ya se fantasea con estos robots sociales, un panorama que no dista demasiado de lo que podría guardar el futuro, creando un mundo al estilo Black Mirror en que humanos y robots no se piensen como diferentes. "Los robots están aquí y no desde ayer", desengaña Romera, "por lo que se plantea una reflexión sobre cómo está avanzando esto de la Inteligencia Artificial y dónde queremos llegar con ello, porque al final los creadores somos nosotros", sentencia.
