Las cinco patas del búnker de Puig pendientes de revisión en la legislatura del Botànic II 

8/05/2019 - 

VALÈNCIA. Las negociaciones entre PSPV, Compromís y Unides Podem para la conformación de un gobierno de coalición -el llamado Botànic II-, se encuentran todavía en fase embrionaria. El resultado electoral de los comicios del 28A mostró un aumento de la ventaja de los socialistas que lidera Ximo Puig frente a la coalición valencianista que encabeza Mónica Oltra y la confluencia entre Podem y Esquerra Unida que capitanea Rubén Martínez Dalmau

Con estos mimbres, el ahora presidente de la Generalitat tiene todos los números para continuar cuatro años más como principal inquilino del Palau. Bien es cierto que por delante se abre un periodo de negociación complejo en cuestiones como el rediseño del nuevo Gobierno valenciano, el reparto concreto de áreas o el mestizaje entre los distintos partidos, pero no parece existir duda alguna sobre que Ximo Puig volverá a ser el jefe del Ejecutivo.

Así, muchos son los pasos que quedan por dar hasta alumbrar el Botànic II, pero no conviene dejar de lado la revisión de otra arquitectura, en este caso interna, que el jefe del Consell deberá afrontar en las próximas semanas: la de los pilares que sostienen su núcleo duro. Un compendio de personal que conforma el búnker de Puig y que alberga la materia gris de la Presidencia de la Generalitat. Ahí es nada.

El motivo de reflexión sobre esta cuestión se cimenta en las dudas acerca de la continuidad de varios de los pilares del Palau, debido principalmente al propio desgaste que sufre el equipo de cualquier presidente cuando se enfrenta a una legislatura en la que se ha gobernado en coalición con otra fuerza política (Compromís) y a expensas del apoyo parlamentario de una tercera (Podem).

De esta manera, la revisión de cinco puntos clave en el Palau ofrecen más enigmas que certezas a la hora de calibrar una posible reforma del búnker del presidente para la legislatura entrante.

-Secretaría Autonómica de Presidencia. Ostentada actualmente por Andreu Ferrer, funcionario, experto conocedor de la Administración y amigo personal de Puig. Probablemente, el valor más seguro para el presidente cuando afronte la tarea de dibujar su equipo de confianza para la legislatura entrante.

-Área de Comunicación. Un departamento en el que se han producido varios movimientos en estos cuatro años y que apunta a más cambios en esta etapa. Actualmente, el secretario autonómico del área es José María Vidal, quien estuvo a punto de salir en la recta final de la legislatura en una operación de varias modificaciones en el segundo escalón que finalmente no vio la luz. Por otro lado, la directora general de Relaciones Informativas y Promoción Institucional es la periodista Marta Hortelano; que podría continuar en este departamento -tampoco se descarta un rediseño en el mismo-, recalar en otro o volver a la empresa informativa privada. Ahora bien, todo indica que en este departamento habrá novedades ya sea de nombres propios o de modificación de competencias.

Puig junto a Arcadi España y Marta Hortelano, dos miembros destacados de su equipo. Foto: KIKE TABERNER

-Dirección de Gabinete. Otra pieza fundamental en el engranaje del Palau es Arcadi España, quien ya estaba integrado en el núcleo duro de Puig en el PSPV antes de alcanzar la Presidencia de la Generalitat en 2015. No obstante, el desgaste ha conllevado que en más de una ocasión sonara para puestos fuera del Palau, como hace un año para la Delegación del Gobierno o incluso ahora para otros cargos en el Gobierno valenciano o quizá en labores similares a las actuales en algún ministerio. Su continuidad o no puede tener una notable relevancia a la hora de diseñar el resto del equipo del Palau. 

-Área de Análisis. Al igual que Comunicación, este departamento ha sufrido varios cambios a lo largo de la legislatura. La primera opción de Puig fue el periodista Pep Torrent, quien falleció en mayo de 2016 tras una larga enfermedad. Meses después, el cargo fue ocupado por Gustavo Zaragoza y, en noviembre de 2017, fue sustituido por Julián López; quien en marzo de 2018 pasó a ocupar un puesto en una empresa pública estatal. Finalmente, hace apenas un año Puig decidió situar al frente de esta dirección general a Fernando Flores, profesor universitario con una trayectoria destacada en los gobiernos de Zapatero. Esta ha sido probablemente la etapa de mayor estabilidad y progresión del departamento, si bien todavía no está definido el plan de Puig para la mencionada área.

-Asesores. Presidencia de la Generalitat concluye la legislatura con 27 asesores, si bien no todos son de Ximo Puig. Cuatro corresponden a los expresidentes Francisco Camps y Alberto Fabra y, además, dos de las plazas están ocupadas por personal vinculado a Mónica Oltra. No obstante, los otros 21 sí son efectivos solicitados por el jefe del Consell: resulta indudable que el equipo conformado en su día -y que ha ido variando a lo largo de cuatro años- sufrirá entradas y salidas en las próximas semanas ya sean voluntarias o por el deseo del presidente de realizar cambios para afrontar la nueva legislatura.

Noticias relacionadas

next
x