ELCHE. El comportamiento de mayo en términos de ocupación hotelera en Elche ha resultado positivo, en tanto que alcanza un 78,4%, una cifra que supera ampliamente el 73,1% registrado el mismo mes de 2018. Es sin embargo una cifra algo inferior a la obtenida en abril, que fue inusualmente elevada gracias a la confluencia de Semana Santa y eventos deportivos significativos.
En mayo tuvieron lugar algunos eventos que contribuyeron a impulsar la alta ocupación. La prueba deportiva Transilicitana y la competición de marcha nórdica Elche entre palmeras se celebraron el 4 de mayo; el encuentro anual de la Asociación Española de Traductores, Correctores e Intérpretes fue del 10 al 12 de mayo; el Congreso Internacional para el diálogo con las culturas hispanas de América del Norte tuvo lugar del 29 al 31 de mayo y el Concurso de Modelismo Estático Ciudad de Elche comenzó el último día del mes.
Este escenario de buenas cifras de ocupación esconde, sin embargo, una realidad que comienza a ser preocupante. Al igual que sucedió los meses precedentes desde el comienzo de 2019, los precios cobrados por las estancias hoteleras se sitúan por debajo de los percibidos un año antes. El ingreso por habitación disponible, denominado técnicamente revpar, se ha situado en los 51,27 euros, 2,15 euros por debajo del conseguido en abril y 3,16 euros inferior al registro de mayo de 2018.
El contexto nacional continúa siendo favorable. Según la estadística mensual del INE para abril, crecen los viajeros y las pernoctaciones en el dato interanual hasta situarse en los 9.141.970 y 26.888.520 respectivamente. El gasto de los turistas internacionales se incrementa para el mismo mes en un 7,15% frente a abril de 2018 y el revpar nacional alcanza los 53,45 euros. El aeropuerto de Alicante-Elche en abril recibió un total de 1.341.713 pasajeros, lo que representa in incremento del 9,7% respecto al mismo mes de 2018.
Con este escenario, urge tomar medidas para dinamizar los muchos recursos disponibles en la ciudad y generar nuevos atractivos que permitan mejorar las cifras de ocupación fuera de los fines de semana, recuperar los precios medios y garantizar la sostenibilidad de los negocios turísticos a medio plazo.