VALENCIA. A la familia Lladró, que llegó a tener más de 100 millones de euros repartidos en una decena de sicavs como publicó este diario hace un año, solo tiene presencia en una: la histórica West River presidida por María del Carmen Lladró Castelló, hija de José Lladró Dolz. La penúltima que les quedaba, Mint Inversiones, cambió de manos en febrero pasado, tal y como lo ha constatado este diario de la base de datos pública de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Mint Inversiones pasó a denominarse Soltaja y del consejo de administración salieron Ignacio Jara Terrádez, presidente y marido de María Luz Lladró Sala -hija de Juan Lladró Dolz-, mientras que al frente del mismo lo hizo Atanasio Caminero Romero. Se trata de un empresario con varias empresas de diferentes sectores (imagen, inmobiliario, hostelería...) en Vizcaya. Todo apunta a que los Lladró han vendido dicha sicav como en su día con North Cape. Atrás quedan Selección Diversificada, North Cape Inversiones, Inversiones Mobiliarias Aletheia, Platinium Investment, Pecamian, East Wind Inversiones, East Star y South Hill.
De momento solo les queda West River, una de las históricas sociedades de inversión de capital variable no solo en el panorama financiero valenciano sino español, cuya fecha de registro oficial en el organismo supervisor se remonta a febrero de 1997. Al cierre del tercer trimestre del año contaba con un patrimonio de 5,50 millones de euros, prácticamente el mismo con el que despidió 2015.
Domiciliada en Madrid, gestionada y depositada en el gigante suizo Credit Suisse, contaba con 177 accionistas a 30 de septiembre pasado. Pero eso sí: uno solo tenía el 99,83% del total. Esta sicav fue sancionada por la Agencia Tributaria con 3,09 millones de euros en mayo de 2005 tras una inspección derivada de la comprobación de su régimen fiscal especial del impuesto sobre sociedades de los ejercicios 1999 a 2002.
Bastante menos patrimonio mantenía al cierre del tercer trimestre Soltaja, la otrora Mint Inversiones de los Lladró, dado que cerró el tercer trimestre con 2,95 millones aunque por encima de los 2,58 millones del último día de 2016. Dicha sociedad está domiciliada en Madrid, concretamente en la sede de Bankinter, su gestora y depositaria, algo habitual -y totalmente lícito- al que recurren no pocas sicavs en España.
La entonces Mint Inversiones se vio afectada en su día, cuando estaba en manos de los Lladró, por el 'caso Madoff', que le impactó directamente sobre el 9,75% de su patrimonio cuando la gestión corría a cargo de la extinta Fortis Gesbeta.