ALICANTE. La asamblea de Guanyar continúa instalada en la división tras el proceso de renovación registrado en la cúpula de Esquerra Unida -su socio mayoritario- el pasado febrero. Y en realidad, el motivo de enfrentamiento sigue siendo el mismo: el proceso de selección impulsado a finales de noviembre para elegir a las personas que deben asesorar al grupo de concejales en el Ayuntamiento de Alicante.
La plataforma electoral debía ratificar este miércoles los pasos seguidos en ese proceso, la baremación de los candidatos presentados y la selección de los aspirantes mejor valorados. Y el acuerdo prosperó por mayoría (37 votos a favor, uno en contra y dos en blanco), pero no por unanimidad de los asistentes que habían acudido de inicio a la sesión. El portavoz municipal de Guanyar, Miguel Ángel Pavón, y alrededor de una quincena de militantes de EU de su entorno más próximo decidieron ausentarse cuando llegó el momento de votar (esta vez, según fuentes de Guanyar, mediante voto secreto).
La selección de los nuevos asistentes del grupo queda aprobada pero suspendida hasta que se resuelvan los recursos
Lo hicieron, según expresó el propio Pavón antes de abandonar la asamblea, al no reconocer la convocatoria de un proceso que sólo trataba de apartar a dos de las actuales asesoras del grupo -de su entera confianza- que se habían dedicado a fiscalizar que se cumpliese la contrata municipal de limpieza, de acuerdo con lo establecido en su programa electoral. Además, insistió en que el proceso de selección no podía ratificarse porque se habían presentado varias impugnaciones sobre las que todavía debía pronunciarse el comité de garantías de Guanyar.
En realidad, el acuerdo que se alcanzó en la asamblea fue el de ratificar el proceso de selección de los nuevos asesores, pero dejándolo en suspenso, sin que tuviese eficacia, hasta que se produjese esa resolución del comité de garantías. Es decir, que las dos asesoras seguirían desempeñando sus funciones como hasta ahora. Las mismas fuentes precisaron que la resolución del comité de garantías no es vinculante, por lo que, además, tendrá que haber una nueva votación en asamblea para que el proceso se pueda dar por terminado.
Sea como fuere, las mismas fuentes precisaron que la decisión de Pavón generó extrañeza y preocupación sin que, por el momento, se conozca si ese gesto puede tener consecuencias. Por lo pronto, se abrirá un periodo de reflexión para analizar la situación generada en el seno de la plataforma electoral.