VALÈNCIA (EP). La Federación Empresarial Metalúrgica Valenciana (Femeval) ha diseñado un plan de reactivación para cuando acabe el estado de alarma que incluye siete medidas entre las que incluye la necesidad de estímulos al consumo, crear mercados ágiles, una mayor flexibilidad laboral así como una transformación digital y una apuesta por la innovación, entre otras.
El documento, "Plan de Reactivación del Sector Metalmecánico. MEDIDAS PARA EL DÍA DESPUÉS", sienta las bases para afrontar "un escenario derivado de una grave crisis sanitaria como consecuencia de la pandemia del coronavirus que ha conllevado una crisis económica sin precedentes", según ha detallado en un comunicado la organización empresarial.
La propuesta prioriza siete medidas que abarcan la reorientación al mercado local y la reactivación industrial; la mejora de la competitividad; el crecimiento y cooperación empresarial; una transformación digital, fomento de las TEICS e incentivos públicos; una innovación abierta, salud y nuevos retos para el sector; por las energías renovables, autoconsumo y movilidad, así como propuestas para recuperar y gestionar el talento y mejorar la cualificación.destaca , presidente de Femeval.
"Esta propuesta de medidas es un primer paso para prepararnos para el día después y un ejercicio de responsabilidad con nuestro sector, según ha indicado el presidente de Femeval, Vicente Lafuente, que ha indicado que "esta crisis ha dado lecciones que hay que aprender y la primera es que esta situación requiere acción".
Así Femeval defiende que haya estímulos al consumo con una apuesta decidida por la reorientación al mercado doméstico, con la activación de planes de fomento del consumo, con planes 'renove', para coches o maquinaría y planes para la rehabilitación de vivienda así como la promoción de la compra pública.
También apuesta por mejorar la competitividad, por lo que solicita a las administraciones públicas un marco regulatorio adecuado al entorno globalizado en el que operan, y por mercados laborales ágiles que se adapten a los cambios derivados del progreso tecnológico y la digitalización.
Estos avances, "que cuestionan la compatibilidad de la legislación del siglo pasado" con la actual realidad económica y social", según Femeval, requieren que la regulación de la jornada se adapte a un entorno laboral cambiante para dar flexibilidad a las empresas y a sus trabajadores. "Obcecarse en un marco regulatorio rígido solo obstaculizará nuestra necesaria reindustrialización de la economía e incrementará los niveles de desempleo", ha apuntado Lafuente.
La fortaleza del sector en los próximos años va a estar ligada a la disponibilidad de las empresas tractoras de la Comunitat Valenciana de una red de proveedores locales que satisfaga sus necesidades de productos y servicios, evitando de esta manera depender de cadenas de suministros externas o en el peor de los casos, llegar a deslocalizar la producción, según la organización que apuesta por lograr la incorporación de empresas metalmecánicas en mercados emergentes a los que no pueden acceder por limitaciones de tamaño, costos, inversión o capacidad de producción.
Con la crisis de la COVID, se ha visto además reforzada la colaboración entre empresas y entidades, de diferentes ámbitos y sectores por lo que Femeval apuesta por mantener y establecer redes de colaboración "sólidas y permanentes", a través de alianzas estratégicas entre el sector empresarial, público, tecnológico y académico, relacionadas con la innovación y la digitalización.
Así, recoge que la esta crisis ha puesto en evidencia un déficit de digitalización en las pymes y microempresas, y en la propia Administración por lo que urge un plan ambicioso de transformación digital para Pymes, a medio y largo plazo, con ayudas destinadas a inversiones en digitalización, tecnología y procesos 4.0.
Para garantizar la competitividad del sector, Femeval solicita la protección y una mejor educación en materia de respeto a la creatividad y la innovación y promover la compra pública innovadora y verde incrementando los procedimientos de contratación pública en los que se prime la innovación del producto, el producto verde o el procedente de economía circular y de proximidad.
Por su parte, las empresas proveedoras del sector sanitario-hospitalario tienen que cumplir altos estándares de calidad y seguridad, según la federación que propone que desde la administración se apoye el proceso de certificación de empresas metalmecánicas que quieran proveer a este sector, fomentando así una red comercial local y aumentando el negocio y competitividad de otros sectores.
Así defiende la necesidad de incentivar la colaboración público-privada con medidas como el apoyo a iniciativas de innovación abierta entre el tejido industrial y el sector sanitario-hospitalario y destaca también que las empresas necesitan una energía eficiente, sostenible y a bajo coste y un marco legal predecible.
Femeval considera, asimismo, la Smart Grid o Red Inteligente como una oportunidad para consolidar una red sólida de agentes involucrados en la movilidad sostenible y como un paraguas bajo el que enmarcar las líneas de trabajo hacia una movilidad conectada, sostenible e integrada en la Comunitat Valenciana.
