El uso de la 'hucha' de los ayuntamientos sólo contenta al PSOE; el PP ve una confiscación

ALICANTE. La Junta de Gobierno de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha aprobado aceptar la propuesta del Ministerio de Hacienda para la liberación de los remanentes y el uso del superávit de los ayuntamientos con la abstención del Grupo Municipalista Izquierda Unida-Podemos-Comuns.


En concreto, la propuesta incluye una aportación de 5.000 millones de euros (2.000 para este año y 3.000 para el próximo) para los ayuntamientos que pongan a disposición del Ejecutivo central sus remanentes. Asimismo, las diputaciones podrán formalizar préstamos y realizar transferencias finalistas no reintegrables a administraciones locales que se encuentren en una situación económica vulnerable.

Abel Caballero ha detallado también que el acuerdo establece la prórroga del sistema del superávit y mantiene las entregas a cuenta. Además, ha indicado que habilita un fondo de transporte de 400 millones de euros y garantiza que "las entidades locales puedan participar en los fondos de recuperación de la Unión Europea (UE)".

La ministra de Hacienda y portavoz del Gobierno, María Jesús Montero, ha defendido que Hacienda "ni roba ni expropia ni se queda con el dinero de los vecinos" con el acuerdo sobre el superávit municipal, tras las críticas del PP, al que acusa de "mentir con total descaro", al tiempo que recuerda que la adhesión al fondo de 5.000 millones es "voluntario".  Posteriormente, a partir de 2020, el Ejecutivo central revertirá a los municipios el 100% de los remanentes recibidos en un plazo de 10 años, así como intereses.

La propuesta solo ha logrado el aplauso de los alcaldes y dirigentes socialistas. El PP ha salido en tromba a cuestionarlo. Y Podemos y Compromís también le han puesto repaso. Así, para Luis Barcala este escrito, además de ser “decepcionante e insatisfactorio”, deja al Ayuntamiento de Alicante sin los recursos que necesita para hacer frente a los efectos económicos y sociales que nos ha traído la pandemia”. El primer edil reprocha a la izquierda que “por acción u omisión haya permitido el expolio del dinero de los alicantinos, de los ahorros que teníamos y que queríamos destinar a ayudar a las familias vulnerables y a nuestros pequeños y medianos empresarios”.

Compromís, por su parte,  defiende que estos fondos deberían ser empleados por los propios consistorios, puesto que "son los que han hecho grandes esfuerzos de ahorro y contención del gasto durante años como para que ahora sean confiscados por el Estado, el estamento público más endeudado de España". Con esta medida, Compromís considera que el gobierno PSOE-Unidas Podemos "confisca los ayuntamientos y las diputaciones de sus remanentes de tesorería, interviniéndolos de facto e hipotecando su futuro". Ahora, a su juicio, es el momento de los acuerdos y de reforzar el municipalismo, "no del centralismo".

La alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, ve un "error" el acuerdo del Ministerio de Hacienda para la liberación de los remanentes y el uso del superávit de los ayuntamientos que la Junta de Gobierno de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha aprobado este lunes con la abstención de IU-Podemos. "El decreto forzado por Hacienda es un error: trabajaremos desde la unidad municipalista para que se modifique en el Congreso", ha asegurado la alcaldesa en un tuit recogido por Europa Press.

El presidente del comité parlamentario del PSPV-PSOE, Alejandro Soler, por su parte, ha valorado el acuerdo como “una oportunidad para planificar una nueva agenda de actuación municipal y una gran ocasión para replantear las prioridades de cara a proyectar un futuro más próspero para nuestra Comunitat” tras la pandemia de la COVID-19. "Con la liberación de los remanentes y el uso del superávit de los ayuntamientos demuestra que “el Gobierno central comparte la visión del Consell presidido por Ximo Puig de que los gobiernos locales, y especialmente los ayuntamientos, no sólo son claves para la reconstrucción social”, sino que además “tienen un papel protagonista en la nueva normalidad”, afirma Soler.