VALENCIA, (EFE). El futuro inmediato de la investigación del caso Imelsa pasa por ampliar las pesquisas respecto a la financiación del club de fútbol Olímpic de Xàtiva, el club de fútbol que presidió Alfonso Rus, varias obras supuestamente amañadas desde la dirección de Ciegsa y la facturación de Imelsa.
Se trata de documentación que obra en la pieza principal del caso y que, según fuentes judiciales consultadas, todavía no ha sido analizada en profundidad. Sin embargo, existen suficientes indicios como para sospechar que en el seno de la empresa pública Ciegsa, ya investigada en el caso por supuestos contratos ficticios de personal, se pudieron amañar varias obras, que habrían sido facturadas muy por encima de su coste real y por las que se habrían cobrado cuantiosas comisiones.
Los indicios con los que trabajan los investigadores se sustentan básicamente en conversaciones entre los principales imputados, entre los que se encuentra el ex secretario autonómico de Educación y ex consejero delegado de Ciegsa, Máximo Caturla, que fue responsable de finanzas del PP provincial y vicepresidente de la Diputación con Alfonso Rus.
Otros de los asuntos respecto a los cuales se debe completar la investigación son los relacionados con el Olímpic de Xàtiva y su financiación, ya que, aunque algunos de los empresarios que colaboraron con esta entidad ya han sido investigados y citados a declarar, existen fundadas sospechas del desvío de fondos de forma ilícita hacia el club.
Por otra parte, en la conocida como pieza principal, todavía se ha de desgranar buena parte de la facturación de Imelsa, una empresa pública controlada por la Diputación de Valencia que creció durante años para asumir competencias propias de diversas áreas del Gobierno de la corporación provincial de forma paralela. Las mismas fuentes han señalado que todavía se han de aportar a la causa varios informes periciales de perfil económico.
Por otra parte, han advertido sobre la carencia de medios informáticos suficientes para analizar la ingente documentación acumulada en un año de instrucción de esta macrocausa. Concretamente, se hace referencia a la necesidad de disponer de un software que permita transformar documentos en formato .pdf para poder realizar búsquedas por palabras dentro de los mismos y agilizar su estudio.
Este sistema, han detallado las mismas fuentes, está disponible en la Audiencia Nacional y en la mayoría de los despachos de los abogados defensores y sin él, este tipo de causas "resultan inmanejables", han lamentado.
El titular del juzgado de Instrucción número 18 de Valencia, Víctor Gómez, dispone de un juez de refuerzo desde el pasado mes de marzo para poder dedicarse en exclusiva a la investigación de la causa, gracias a que su petición fue aprobada con celeridad por el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.
Las fuentes judiciales consultadas por Efe lamentan, sin embargo, la falta de medios adecuados, básicamente informáticos, para hacer frente a la causa con celeridad.
Actualmente, la investigación se divide en una pieza principal, seis piezas separadas y una subpieza, de modo que las partes cuya instrucción se encuentra más avanzada son las relativas a los supuestos contratos ficticios de asesores políticos en Imelsa y la pieza de blanqueo.
Sin embargo, la reciente aportación al juzgados de varias facturas y contratos relacionados con la campaña electoral de 2007 podrían demorar más de lo inicialmente previsto esta parte de la instrucción.
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