VALÈNCIA. El próximo año, À Punt sufrirá una importante renovación en la cúpula directiva. Con el concurso de la dirección general en marcha -al que todo parece indicar que Empar Marco no se ha presentado-, también la presidencia deberá renovarse después de que el actual presidente, Enrique Soriano, trasladara al jefe del Consell, Ximo Puig, su intención de dejar el cargo que ocupa en cuanto le encuentren un sustituto.
Un proceso que será complejo de resolver. No en vano, en la legislatura pasada la búsqueda de un candidato generó desencuentros en el Botànic después de que el PSPV propusiera a Josep López y se hicieran públicos sus vínculos familiares con representantes socialistas, lo que terminó descartando al aspirante y dejó en standby la elección durante cuatro meses hasta que en octubre tomó posesión Soriano.
Por el momento, según informó Abc, uno de los nombres que habría sonado entre los socialistas para relevarle al frente de la Presidencia de la Corporació Valenciana de Mitjans de Comunicació (CVMC) sería el de Miguel Mazón. Sin embargo, fuentes consultadas por este diario aseguran que el propio exconsejero de administración de RTVV y exsecretario general en la Conselleria de Hacienda en la etapa de Joan Lerma habría declinado la oferta.
Precisamente para evitar afinidades de cualquier candidato con una formación política en concreto, en Compromís son partidarios de esperar a que se constituya el Consell del Audiovisual y que sea este órgano el encargado de elevar tres candidatos a la Presidencia de la CVMC a Les Corts Valencianes, tal y como dicta la ley aprobada en julio de 2016.
En concreto, la normativa de la Corporació especifica en su artículo 11.2 que el proceso para la elección de la Presidencia del Consejo Rector, a la que también corresponderá la presidencia del ente, se iniciará por el Consejo Audiovisual de la Comunitat Valenciana, "que abrirá una convocatoria pública y seleccionará a un máximo de tres candidatos o candidatas, emitiendo un informe sobre el proceso de selección y sobre los candidatos o candidatas propuestos, que presentará ante la Comisión de Radiotelevisión Valenciana y del Espacio Audiovisual".
Así, sería la comisión del Parlamento valenciano la encargada de seleccionar a uno de ellos y proponerlo al pleno de la cámara para su nombramiento, de manera que la responsabilidad de proponer un aspirante no recaería sobre los socialistas, que fueron la última vez quienes propusieron tanto a López como a Soriano.
Ahora bien, conviene recordar cuál es la situación actual del citado Consejo del Audiovisual, órgano al que le corresponde velar por la calidad de la información que se emita en À Punt para que sea imparcial y que tres años después de haberse aprobado la ley todavía está por constituir.
La legislatura pasada los partidos del Botànic aprobaron la ley que debía dar vida al citado organismo. Sin embargo, pocos minutos después Podem solicitó su modificación para cambiar el método de elección de los consejeros. Un cambio que no llegó a realizarse porque finalizó la legislatura y que, a pesar de adoptar el compromiso de retomar este deber pendiente en esta legislatura, todo parece indicar que no se acometerá.
Podemos quería en la legislatura pasada modificar la ley para que todos los consejeros que integraran el órgano (un total de siete) fueran designados por Les Corts y que el presidente del mismo fuera elegido por la Cámara y no por el president de la Generalitat, Ximo Puig, para garantizar su neutralidad y evitar así que el organismo estuviera mediatizado por el Consell. La ley actual fija que cinco son elegidos por el Parlamento y dos por el Gobierno, y la presidencia del mismo sería designado por el jefe del Ejecutivo.
A pesar de que la intención era que el nuevo grupo, Unides Podem, retomara la reforma pendiente, finalmente no lo harán. Así, a la vuelta de las vacaciones navideñas Les Corts tendrán pendiente la constitución de este órgano.
A lo largo de su mandato, Costa lo apostó todo por la audiencia, pero sin un respaldo presupuestario ni burocrático, no ha habido modelo que asentar sino situaciones que amortiguar