Hoy es 23 de diciembre

EL CABECICUBO: REALITIES, DOCUS, SERIES Y TV

'Casados a ciegas': el matrimonio en plan Memento

El programa original de 'Casados a primera vista', de Antena 3, se emite en la cadena Ten de TDT y también plantea relaciones de pareja cuyos miembros se casan sin conocerse tras un estudio elaborado por psicólogos en busca del amor ideal

11/03/2017 - 

VALÈNCIA. En el programa de cabezas rapadas del mundo de la cultura de la ETB tenían razón: España está atrasada culturalmente. Aparte del propio programa donde se hizo esa aseveración, les pongo otro ejemplo que demuestra que es cierto. En la cadena Ten, donde se emite en TDT la pureza y vanguardia de la televisión mundial, las Kardashians van dos años atrasadas. Vienes del extranjero, buscas tu dosis de Kim & Co y te encuentras con que Catlyn Jenner es todavía un hombre. Estamos discutiendo si los programas educativos deberían incluir dirigirse en inglés a los niños desde que se encuentran en el útero materno para que puedan hacer algo más en la vida que opositar en su pueblo ¿y luego les damos las Kardashians con dos años de retraso y dobladas? Ay, si Carandell levantara la cabeza. 

Pero hoy no vamos a hablar de ellas, la quintaesencia de los realities, la mayor sofisticación de los sentimientos de vergüenza ajena que pueda sentir un espectador. Analizaremos 'Casados a ciegas' un programa que también está echando en España la impagable cadena Ten y que transmite a la perfección todo lo que buscamos en un buen reality: tristeza, dentera e indignación. Se trata del original de 'Casados a primera vista' de Antena 3 y que, a diferencia del americano, no consigue que se case nadie.

'Casados a ciegas' plantea las relaciones de pareja en plan Memento, la película. Es decir, de atrás a delante. Primero te casas y luego conoces a tu pareja. Los novios se ven por primer vez en el altar. ¿Es esto una locura? Pues con lo habituales que son las gentes que se emparejan para simular que su vida va bien a los ojos de la sociedad, los que no se separan por el mismo motivo o los que se separan e inmediatamente se emparejan con alguien a quien no conocen de nada porque han visto de cerca el abismo, la realidad es que el programa no hace más que plantear la vida misma solo que de forma juguetona. 

Como todos los espacios catódicos que buscan elevar nuestra vergüenza ajena a cotas siderales, 'Casados a ciegas' se vende como un "experimento sociológico". Hay un montón de expertos, psicólogos y tal, que analizan a decenas de personas para ver quiénes pueden ser a priori una pareja bien avenida y entonces forman tres. Esas tres parejas, sin haberse visto en la vida, se casarán y ahí, en el altar, será donde se conocerán. Pero eso no es lo mejor. La gracia está en las familias que acuden como invitados a la boda. Padres que van al enlace de su hijo, que felizmente se va a casar, pero que todavía no sabe con quién. Tiene su aquél. 

Por norma general, los personajes del reality son solteros que, sometidos a presión social, tienen una ansiedad por casarse contra la que nada pueden hacer. Dicen que se sienten solos, que es muy duro ser solteros en Nueva York, que envidian la familia feliz de su tío del pueblo, etcétera. Lo expresan claramente en las entrevistas previas del programa y, sin atisbo de vergüenza, se someten al "experimento sociológico".

Hay que reunir mucho valor, pero luego los varones del experimento demuestran ser un arado con patas más. Preguntados qué esperan de su esposa sorpresa, caen en lo mismo de siempre, que sea "guapa". Lo dicen de esa manera, indirecta, pero por las vueltas que le dan y cómo se angustian, lo que les preocupa claramente es llegar y encontrarse con alguien que no esté buena. Ahí, sí se echa de menos la I+D española, puntera en el mundo en este sector, con una Mercedes Milá que rompa los tabúes y le diga "pero tú no eres muy gordo como para exigir?" o algún otro tipo de argumento científico que contribuya al buen término. 

Al final, lo que ocurre es que a cada pareja le ocurre algo distinto. Por ejemplo, en un matrimonio a ella le da asco el tío conforme va andando hacia el altar y la cosa empieza mal. Durante la luna de miel, le trata como si fuera su mejor amigo, se refiere a él como "hermano", o "colega". En lugar de besarle, le dice "choca esos cinco". Y claro, para unos días, bien, pero es que luego tienen que volver a la vida real juntos. 

La siguiente pareja, en cambio, funciona muy bien. Ella es paquistaní y de niña sufrió episodios de racismo. Luego su madre abandonó a su padre, de modo que los paquistaníes, como una novela de Hanif Kureishi, también se metían con ella. Y su marido seleccionado en el experimento, igual. En el colegio se metían con él los demás niños y ni lo olvida ni parece que lo haya superado. Tras contarse sus historias, se enamoran totalmente, aunque la familia de ella no quiso ir a la boda -me pregunto por qué- y la de él fue a regañadientes. Pero en la luna de miel siguen compartiendo los tristes recuerdos de su infancia y funcionan. Su primer choque es cuando, tras un paseo en calesa en el que ella rompe a llorar de emoción, él no la acompaña en el sentimiento y ella se lo reprocha. 

Y para el final dejamos a los únicos que follaron en la luna de miel. Una chica latina y el chico judío. Se gustaron nada más verse, los dos son bien parecidos, y esa noche zasca. Tras la luna de miel, pasaron las navidades con sus familias y todo parecía ser maravilloso, pero no. Había un detalle. Durante un tonteo, ella le enseñó una foto sexy de años atrás. Llevaba un piercing en el labio superior y él calificó el detalle como: "Trashy" (elijan la traducción que más les guste entre "cutre", "choni", "sin clase", etc) Se aclaró inicialmente la ofensa, pero ella se ha quedado rallada, cuando todo iba bien. Veremos la semana que viene qué pasa. 

Son relaciones de pareja como Memento, empezadas por la boda. Una ocurrencia que no me creo yo que no haya salido de un brainstorming de la cadena bien regado de Chivas, pero que no es un mal experimento, la verdad. En estas circunstancias, que dios guarde, se les ve a todos un rollo romántico más fuerte que ellos, les han buscado la pareja ideal, quieren tener hijos ¡ser como los demás! no pueden evitar emocionarse, etc... pero a la pocas horas: la realidad. Los calcetines por el suelo, el tío mirando al móvil diez horas al día. La cruda realidad. Y todo creyendo que los expertos son dioses. A la primera dificultad, piensan "pero si nos han unido los expertos será por algo". En fin ¿ve usted que el cambio climático es irreversible y vamos a morir todos? Pues aquí tiene ayuda, apoyo, para que le dé igual. 

Noticias relacionadas

EL CABECICUBO DE DOCUS, SERIES Y TV  

Las Kardashian: ganando millones, marcando estilo, alquilando vientres...

Por  - 

La segunda temporada de las hermanas en Hulu se centra en las desgracias de Khloé, que a su fiasco amoroso con Lamar Odom -al que hubo que sacar en coma de un puticlub en el que se había encerrado varios días- hay que unir las infidelidades de su siguiente pareja, Tristan Thompson, otro crack de la NBA, todo mientras esperaban un bebé por vientre de alquiler

EL CABECICUBO DE DOCUS, SERIES Y TV 

'True story': El poder persuasivo de los reality shows y sus consecuencias políticas

Por  - 

Aunque los sectores conservadores rechazan los reality shows y sus escándalos, la paradoja es que estos programas en realidad refuerzan generalmente los valores más anticuados de la sociedad. Así lo explica la profesora de la Universidad de Lehigh, Danielle J. Lindemann, en un libro que explora los contenidos de este tipo de programas en Estados Unidos sin olvidar el más importante, el que impulsó hasta la Casa Blanca al ex presidente Donald Trump

EL CABECICUBO DE SERIES, DOCUS Y TV  

'La Isla de las tentaciones': Pánico a unos cuernos ridículos

Por  - 

No se engañe, Cassavetes habría dado un brazo por ser el autor de Gandía Shore. Los realities, cuando no se repiten hasta la saciedad, son obras de arte de nuestro tiempo. Así lo demuestra La Isla de las tentaciones, de Telecinco y Cuatro, un programa que ha logrado elevar nuestra vergüenza ajena a cimas doradas que ya no se recordaban en la telerrealidad. 

next
x