VALÈNCIA. La maniobra por parte del PSPV-PSOE que lidera Ximo Puig para hacerse con la Diputación de Alicante de la que viene informando Alicante Plaza es complicada. Los socialistas están dispuestos a apoyar a la candidata de Ciudadanos en la ciudad, Mari Carmen Sánchez, a cambio de que la formación naranja haga lo propio con los del puño y la rosa en la corporación provincial, donde el PSPV fue la más votada aunque con el mismo número de escaños que el PP, por dos de Ciudadanos y uno de Compromís.
La del Ayuntamiento es una operación compleja dado que el apoyo de los nueve concejales de socialistas no sería suficiente para investir a Sánchez en el consistorio, sino que sería necesario el apoyo de alguno de los dos concejales que posee Compromís o Unidas Podemos.
En primer lugar, Ciudadanos sigue mostrándose reticente a entrar en este intercambio. El líder del partido en la Comunitat Valenciana, Toni Cantó, calificó este miércoles de "muy complicado" pactar con un PSPV que, a su juicio, no tiene "ningún empacho en llegar a acuerdos con el populismo o el nacionalismo", si bien añadió que no cerrará ninguna puerta hasta hablar de política. Por tanto, difícil, sí, pero no imposible tal y como vino insistiendo por parte de Albert Rivera durante la campaña de las elecciones generales. Sin duda, será importante observar la evolución de los acontecimientos en Madrid para ver qué tipo de decisiones se van adoptando desde la formación naranja en otras autonomías e instituciones que están en juego y dependen de sus votos.
Ahora bien, este sería el primer paso e, indudablemente, el más importante. Pero se requiere de otro: los números necesarios para alumbrar el acuerdo en el Ayuntamiento de Alicante. O lo que es lo mismo, que Compromís o Podemos decidieran participar del acuerdo para evitar que el PP retuviera la Alcaldía y la presidencia de la Diputación.
Hasta el momento, no hay pronunciamientos oficiales -sólo se ha desmarcado el portavoz local, Natxo Bellido-, pero el asunto sí que ha empezado a comentarse en las cúpulas de distintos partidos. En Compromís, distintas fuentes del partido próximas a la dirección se muestran prudentes y dispuestos a escuchar en el caso de que Ciudadanos abra la puerta a negociar esta posibilidad. Conviene recordar que la coalición valencianista tiene un diputado provincial que podría obtener mayores cuotas de protagonismo con una institución gobernada por los socialistas que si el PP mantiene el poder. En esta línea, algunas fuentes consultadas por este diario también apuntan a determinadas alcaldías de la provincia, como Teulada-Moraira, donde el respaldo de Ciudadanos podría ser importante para Compromís. Así pues, la fuerza valencianista no cierra la puerta a una hipotética negociación.
Más tajantes se mostraban fuentes de la dirección de Podem, desde donde aseguraban ver "incoherente" la posibilidad de apoyar la investidura de la candidata de Ciudadanos. Una fuerza política que, a su juicio, se diferencia "más bien poco" del PP e incluso en algunas cuestiones ha "pasado por la derecha" a la formación popular. En esta línea, los dirigentes consultados opinaron que tampoco encontraban "justificable" respaldar para la Alcaldía a "la tercera fuerza política" en las urnas.
Un compendio de argumentos que, sumado a las pocas opciones de compensación que a juicio de Podemos podría tener el acuerdo, amasa la posición de rechazo de la formación morada a entrar en las negociaciones.