ALTEA. El pleno de Altea aprobó este miércoles de manera definitiva el presupuesto para 2021. Contó con los votos a favor del gobierno local formado por el bipartito de Compormís y el PSOE, la abstención de Ciudadanos (Cs) y el voto en contra del PP. La edil de Altea amb Trellat, Ana Alvado, estuvo ausente de la sesión desde su inicio. Como ya contara este diario, el ejercicio tiene una previsión de ingresos de 32.175.237 euros y una de gasto de 31.967.815 euros, con un superávit de 195.421 euros.
El pleno sirvió para desestimar las alegaciones a las cuentas, que reclamaban más ayudas para la ciudadanía debido a la pandemia. Una petición que sustentaron también desde la oposición. El propio alcalde, Jaume Llinares, durante el pleno señaló que las alegaciones presentadas al documento en exposición pública las firmaba la secretaria del PP, acusando a los populares de retrasar su aprobación definitiva ya que si no hubiera sido por eso, se habría adelantado porque no era necesaria una ratificación por la corporación.
Con todo, la concejal de Hacienda, Xelo González, manifestó que se trataba de “un presupuesto continuista acorde con las acciones y proyectos puestos en marcha en estos últimos años y muy social, orientado a las personas“. En este sentido, afirmó que venían de unas cuentas austeras que ahora se prolongan con modificaciones, como el incremento de partidas al fomento de la ocupación e inserción social, educación y bienestar social. Todo ello a partir del aumento de la asignación a asistencia social por emergencias en 86.000 euros más y en 150.000 euros más de la partida de emergencia social. Asimismo, habrá un fondo de contingencia de 156.544 euros.
Uno de los proyectos que contemplan las inversiones del Consistorio está en la partida que tiene que ir a la regeneración del Frente Litoral en su segunda fase. El mismo lo calificaron desde el gobierno local como el más importante de la última década pero que no impedirá realizar otras inversiones en la ciudad sin subir impuestos a la ciudadanía, según aseveró la concejal de Hacienda.
La portavoz de Ciudadanos, Amalia Campomanes, y su homónima del PP, Rocío Gómez, reclamaron que se incrementaran las partidas para atender las demandas sociales de la población. Sobre todo teniendo en cuenta que según sus expectativas, en el 2021 las empresas volverían a tener graves problemas económicos.
Entre otros asuntos, señalaron a las familias, pero también a pymes y autónomos. Por ello, también pusieron el foco en las asociaciones sin ánimo de lucro que estaban cubriendo necesidades de los vecinos con más problemas. En otro orden de cosas, la portavoz de Cs afirmó que le parecía escasa la dotación para el fomento del turismo.
Pero la edil de Hacienda pidió a estos grupos que le enviaran la fórmula para poder aumentar estas partidas sin subir impuestos ni repercutirlo de ninguna forma en los alteanos, además de asegurando la estabilidad presupuestaria. “No se puede pedir que se suban las inversiones, el gasto, las ayudas y se bajen los impuestos”. “Es fácil pedirlo, pero es inviable”; enfatizó González. Asimismo, indicó que es un documento "vivo", del que se podrán mover gasto en función de las necesidades en el transcurso del año.
Tras esto, pidió la palabra el alcalde para explicar que además de las ayudas directas, hay otras opciones para aliviar la economía de los ciudadanos, como es incentivando la contratación e impulsando al sector económico con iniciativas y proyectos.