La responsable de I+D de la constructora CHM, Cristina Ávila, en una imagen de archivo. Foto: RAFA MOLINAALICANTE. Poco a poco, la igualdad real entre hombres y mujeres se va acercando en el mercado laboral. Aunque aún hay notables diferencias, la brecha salarial entre unos y otras se ha reducido un punto en el último año, según el Instituto de Estudios Económicos de Alicante (Ineca), que con motivo del 8 de marzo, Día de la Mujer, ha actualizado su informe sobre la situación laboral de las mujeres alicantinas que publicó el año pasado.
Entre 2019 y 2021, según los datos de Ineca, el avance ha sido de dos puntos. Así, si hace dos años las mujeres percibían el 85,8% del salario de sus compañeros varones, en estos momentos ese porcentaje se eleva al 87,9%. Una mejoría fruto de los cambios experimentados por los salarios en los dos últimos ejercicios, que en el caso de las mujeres se han elevado un 8,4% mientras para los varones el crecimiento era del 5,9%. Con todo, la brecha salarial en la provincia de Alicante se queda pese a los avances en algo más de 12 puntos.
El presidente de Ineca, Nacho Amirola, ha mostrado su satisfacción por este avance aunque ha reconocido que aún queda mucho trabajo. "Los cambios legislativos y normativos han promovido un cambio importante en el desarrollo de la actividad productiva. No obstante, debemos seguir incrementando la transformación de la actividad de las pymes y micropymes de la provincia en materia de conciliación con nuevas propuestas de acción sociales, empresariales y legislativas que faciliten compatibilizar maternidad y carrera profesional de las mujeres".
El autor del informe y director de Estudios de Ineca, Francisco Llopis, ha explicado que la variación entre 2019 y 2021 en la provincia de Alicante ha sido del 8,4% para las mujeres y del 5,9% en los varones. Para el conjunto de España las variaciones han sido similares, respectivamente 7,3% y 4,7%. A partir de estos cambios, la brecha remunerativa en la provincia de Alicante de las mujeres ha pasado del 85,8% en 2019, al 87,0% un año después y en 2021 al 87,9%.
La actualización del informe ha querido analizar igualmente cómo han afectado los ERTE a los trabajadores de la provincia de Alicante. El estudio revela que las trabajadoras en situación de ERTE superan a los varones. Según Llopis, "este dato por sí solo ya es negativo, pero lo es más si tenemos en cuenta que la población laboral masculina supera a la femenina. De hecho, en la provincia de Alicante y para el año 2020 por cada varón en activo había 0,82 mujeres activas".
"El dato de los ERTE para la provincia de Alicante señala que por cada varón en esta situación hay 1,06 mujeres. El promedio para dicho periodo fue de 106,5%, si bien el porcentaje ascendía a medida que la crisis del covid se iba alargando y de hecho, éste promedio para el año 2020 toma un valor de 102,9%, que se eleva en el 2021 hasta el 109,3%. Es importante observar además que la brecha se acentúa en los grupos de edad más vinculados con la maternidad y edad más tempranas de los hijos".
Por otra parte, a partir del 7 de marzo de 2022 entra en vigor la obligación de aplicar un Plan de Igualdad en empresas de más cincuenta trabajadores, tal como explica la letrada Ainhoa Escolano, del despacho alicantino Devesa & Calvo. Desde ese momento, todas las empresas entre cincuenta y cien empleados en plantilla han de tener elaborado su Plan de Igualdad o, al menos, haber iniciado el proceso de elaboración con la creación de la Comisión Negociadora.
"Se trata de una última llamada para aquellos empresarios que aún no han adoptado medidas en materia de igualdad, puesto que, existen más de 16.000 empresas que deben cumplir con dicha obligación a partir de la fecha señalada". Además, "es posible que empresas con menos de cincuenta empleados y empleadas deban implantar un plan de igualdad, cuando a ello le obligue la autoridad laboral en un procedimiento sancionador o cuando así lo recoja el convenio colectivo de aplicación".
La medida no es nueva, sino que entró en vigor en 2019 para eliminar la desigualdad laboral y las brechas de género en el seno de las empresas. "Sin perjuicio de lo anterior, es totalmente recomendable que toda empresa disponga de dichos planes, pues en el mundo actual es necesario ser responsable y estar comprometido con la realidad del momento. La discriminación laboral por razón de sexo es un resto de políticas pasadas y obsoletas que, a estas alturas, ya deberían haber sido erradicadas", defiende Escolano.
"Aplicar estas medidas de igualdad en las empresas contribuye a mejorar el clima laboral y las relaciones entre los compañeros de trabajo, aumenta la satisfacción de los empleados y contribuye a mejorar la imagen de la empresa ante clientes, socios, inversores, autoridades y administraciones públicas". Sin olvidar que si se incumple la obligación de implantar el Plan de Igualdad, las sanciones pueden ir desde la falta grave, con multas de 751 a 7.500 euros, hasta la falta muy grave, que va desde los 7.501 a los 225.018 euros.
