ALCOY. Si las elecciones municipales en Alcoy se tuvieran que guiar los resultados de las generales o las autonómicas, todo parece indicar que serían un paseo militar para la izquierda. En ambas ganó el PSOE, con mucha holgura, con Podemos, de segundo en las generales, y con Compromís, de segundo, en las autonómicas, y con Ciudadanos y PP, relegados al tercer y cuarto puesto. Es decir, que sería una sorpresa mayúscula que Toni Francés no repitiera un tercer mandato; ahora bien, más complicado será saber quién será su socio. El mandato y la campaña han dejado claro que los socialistas no pactarán con Guanyar, entonces con Podemos y EU, y que ahora concurren por separado.
El mandato para Francés no ha sido dificultoso: ha tenido polémicas, casi todas de ámbito doméstico -la degradación comercial del centro histórico de la ciudad y dar encaje al proyecto industrial de Alcoinnova en la zona de La Canal, con sentencias contradictorias- y en cambio, sí que ha logrado que las administraciones supramunicipales invirtieran en la ciudad. La Generalitat ha hecho de Alcoy un destino simbólico de inversiones, con la reapertura del CADA, ahora subsede del IVAM, y la futura implantación del CDT, y, además, la Diputación de Alicante ha asumido una parte importante del proyecto de la Fábrica de Rodes, futuro centro de innovación y emprendimiento empresarial. Incluso por razones de seguridad, el Gobierno invirtió casi 10 millones en rehabilitar el Puente Fernando Reig, emblema de la ciudad, y ha habido unas tímidas mejoras en las línea ferroviaria Alcoy-Xàtiva.
Por lo tanto, se podría decir que no ha habido demasiada tensión, y si ha existido, principalmente, ha procedido de los concejales de Guanyar, los más duros con el PSOE, por la pérdida de la población de la ciudad, la confección del Plan General, la limpieza de la ciudad, etc. Compromís ha sido un enemigo sin mordiente, quizás por la circunstancia de compartir el Gobierno valenciano, y la oposición de Ciudadanos y PP ha pasado desapercibida.
Además de las inversiones recibidas, Alcoy ha conseguido en este mandato hilvanar un proyecto sólido, de la mano de la Escuela Politécnica, de ciudad inteligente. Junto con Benidorm, es la ciudad de la provincia de Alicante y posiblemente de la Comunitat con aspectos más desarrollados para convertirse en una ciudad con una eficiente gestión de datos y con una gobernanza transparente. Y paralelamente, ha logrado situar el Ágora como edificio referente para el emprendimiento y la innovación. Todo ello, motivado por la urgente implementación de la industria 4.0 en muchas empresas del sector textil y en una diversificación de las energías, en este caso, fotovoltaica, para rebajar costes.
Y si la reapertura del CADA IVAM ha reforzado su apuesta por la cultura, más oferta que ya dispensan otros espacios e instituciones, la pérdida de población sigue siendo la gran amenaza para el orgullo de la ciudad, pese a los esfuerzo del gabinete de Francés, que en este mandato ha logrado que la Universidad de Alicante instale el grado de Magisterio, además de otros hitos. Pero mientras la transformación de la industria no sea más emergente y más diversa, el talento alcoyano sigue buscándose el empleo más allá del Barranco de la Batalla. Y la apuesta por la industria sigue sin suplir las bajas que genera la marcha de los jóvenes con estudios superiores. Y en el contexto de la bajada de los 60.000 habitantes, el centro histórico sigue siendo un agujero negro para que no se vislumbra solución estructural a corto plazo. El centro derecha ve, además, falta de agilidad para captar inversiones privadas o generar más suelo industrial, independientemente de lo que pase con Alcoiinnova.
Populares y naranjas han tenido que recomponer sus equipos para afrontar estas elecciones, no sin polémica. En el caso del PP, la elección del periodista Enrique Ruiz, hasta entonces una de las voces más identificativas de Radio Alcoy, aceptó la propuesta de la dirección local del PP para ser el cabeza de cartel, pese a las críticas de un sector, que optaba por Eduardo Tormo. Más desgaste ha tenido Ciudadanos: la marcha de Jorge Sedano, el ex alcalde en la etapa del PP, dejó el camino expédito para que el equipo del propio Sedano aupara a un hombre de su confianza, como era José Miguel Antolí Valls. Y esa propuesta se trasladó a la dirección regional, que, contra todo pronósticos, acabó por imponer a la que era diputada autonómica, Rosa García, lo que ha generado muchas críticas no sólo a la designación, sino a la confección de la propia lista, repleta de familiares. En 2015, ya hubo sorpasso de Ciudadanos al PP: falta por ver ahora si Cs pagará el desgaste interno o si el proyecto de Ruiz siente las bases para competir con el PP. No es fácil el dilema del centro derecha, a sabiendas de que Vox le robará votantes.
En Compromís se estrena Màrius Ivorra; en Podemos, Naiara Davó, que fue concejal con Guanyar. Sandra Obiol será ahora la cabeza visible de la coalición heredera de Esquerra Unida. También se presenta Tercera Edad en Acción.
La duda en Alcoy no es quien ganará las elecciones, la duda es si Francés insistirá en gobernar en solitario, como hasta ahora, o buscará un socio para tener mayor estabilidad, aunque tras los resultados del 28A todo hace indicar que podría tener más representación en el pleno. Todo lo que no sea será una sorpresa mayúscula, pues la izquierda tiene casi 21.000 votos consolidados frente a los 10-12.000 del centro-derecha.
DATOS DE INTERÉS
2015
Población: 59.567
Paro: 6.569
Renta per cápita disponible: 18.183
2019
Población: 58.977
Paro: 5.043
Renta per cápita: 18.677