La Universidad Europea persiste y busca opciones para llegar a Alicante tras romper con Fundesem

ALICANTE. La ruptura del acuerdo de colaboración con Fundesem no cierra el paso para la llegada de la Universidad Europea (UE) a Alicante. Todo lo contrario: la institución académica de carácter privado persiste en su intención de tener presencia en la ciudad y ya rastrea emplazamientos alternativos en los que poder asentarse en cuanto sea posible, después de que no haya prosperado la opción de echar raíces en parte de las dependencias de la escuela de negocios FBS de Fundesem.

La UE mantenía la intención de aprovechar esas instalaciones para impartir hasta cuatro grados distintos relacionados con el ámbito de la salud, entre los que se incluiría la oferta de 50 plazas en especialidades como enfermería, psicología u odontología, como informó este diario. Ese acuerdo se sustanciaba en el pago de un alquiler de unos 180.000 euros anuales por la ocupación de las instalaciones de FBS, además de la ejecución de trabajos de adaptación de su edificio que superarían un desembolso de un millón de euros.

Ese acuerdo era, de hecho, la piedra angular del plan con el que Fundesem preveía saldar la deuda contraída con el Instituto Valenciano de Competitividad Empresarial (IVACE) por el impago de las rentas de alquiler del edificio, propiedad del organismo autonómico, aunque construido sobre una parcela de titularidad municipal cedida por el Ayuntamiento con el objetivo de que tuviese un uso formativo. No obstante, la falta de garantías sobre la continuidad de Fundesem en su actual ubicación, y el retraso en la resolución de esa incertidumbre, acabó llevando a la UE a romper el acuerdo, este miércoles, toda vez que, además, ya resultaba del todo imposible que pudiese comenzar a impartir clases para el inicio del curso, el próximo septiembre. 

En todo caso, los equipos de la UE ya están inmersos en la búsqueda de otras localizaciones para poder desarrollar su proyecto formativo en la ciudad de Alicante, según confirmaron portavoces oficiales consultados. Eso sí, hasta el momento no ha trascendido qué espacios concretos podrían convertirse en alternativa a la escuela de negocios FBS, ni cuándo podría materializarse un acuerdo que permitiese poner en marcha el proyecto de la UE para Alicante.

Entre tanto, Fundesem ha notificado oficialmente este jueves a la Conselleria de Economía el inicio de los trámites para instar el concurso voluntario de acreedores con la pretensión de blindarse frente a posibles reclamaciones de proveedores de servicios. Como ya ha informado este diario, con ese movimiento, que deja el control de la entidad en manos de un administrador concursal, se trataría de ganar tiempo para trazar un plan de viabilidad que permita saldar las deudas pendientes con un nuevo plan de pagos aplazados en el que pudiese negociarse alguna quita. Todo con el propósito de evitar la liquidación.

Está por ver si, tras instar el concurso, Fundesem desiste finalmente de presentar los tres planes requeridos por la Conselleria de Economía en el encuentro institucional celebrado este lunes, como parece probable. En esa reunión, se emplazó a la entidad a precisar un plan que permitiese saldar 600.000 euros de los más de 1,6 millones adeudados al IVACE por el arrendamiento de su edificio antes del mes de septiembre. Además, también se requirió un plan de viabilidad que garantizase la continuidad de Fundesem y un plan formativo a futuro para la escuela de negocios.

Fuentes del departamento autonómico que coordina Rafael Climent han precisado que, por ahora, no se ha presentado ninguna de esas tres propuestas, aunque han incidido en que Fundesem dispondría todavía de margen para poder presentarlas. En cualquier caso, también han confirmado que, de no presentarse, se reactivará el acuerdo de desalojo ya aprobado por el consejo de dirección del IVACE que había quedado en suspenso con la intención de ofrecer una nueva oportunidad a Fundesem que procurase la continuidad de la escuela de negocios. Es más, según fuentes de Economía, el IVACE ya ha dado traslado oficial de ese acuerdo de desalojo aprobado por su consejo el 29 de junio.

De producirse ese desahucio, la pretensión de Economía y del Ayuntamiento de Alicante es procurar que el edificio propiedad del IVACE siga teniendo el uso formativo estipulado en el convenio de cesión de la parcela municipal en la que se asienta. De hecho, ese fue el eje central del acuerdo alcanzado entre Climent y el alcalde de Alicante, Luis Barcala, en la reunión celebrada la semana pasada, en la que ambos se conjuraron para procurar que Alicante siguiese disponiendo de una escuela de negocios de primer nivel aunque no fuese gestionada por Fundesem. En paralelo, Fundesem seguiría trabajando en una planificación que permita garantizar la finalización de los cursos concertados, algunos de ellos previstos para el mes de septiembre.