Zendaya

La vuelta al cole. Biennnnn se oye un sonoro estruendo de alivio de padres y abuelos. Juan Carlos I, comisionista y bon vivant internacional, bien, gracias. Su nieta Leonor abraza a su madre Letizia Ortiz en la T4 antes de salir hacia Gales. Los elenistas atacan de nuevo. Las orcas del estrecho, a los veleros. Antes, cuando existían los quioscos, la aparición de los fascículos y las primeras inundaciones marcaban la vuelta a la rutina. Ahora existen otras señales de cambio de ciclo. La luz se dispara todavía más. Jorge Fernández Díaz apunta directamente a Dolores de Cospedal y a Mariano Rajoy en lo de la Kitchen. Se estrena la nueva temporada de La casa de papel, Inés Arrimadas y Pablo Casado -que no acaba de cuajar ni centrarse- visitan las Fallas, Enrique Iglesias anuncia su retirada y Ximo Puig y Juan Espadas arropan en Jaén el relanzamiento como líder ahora absoluto del PSOE de Pedro Sánchez que culminará con el Congreso Federal en València. Y una vuelta al calcetín al partido centenario de la izquierda.

Carlos Mazón, con su mocadoret faller, también tiene a los suyos acojonadillos ante los cambios -a veces por exclusión y no por integración- que anuncian en el PPCV su imparable ascensión a la candidatura a la presidencia de la Generalitat Valenciana. Está recorriendo un Camino de Santiago que recuerda muchísimo al que hizo Eduardo Zaplana con vuelta a plaza de toros incluida. Mientras, pacocamps.es le pide un despacho a XP para marcar territorio y por si acaso alguien se resbala en la bañera. Desaparece una cala en Xàbia.

Un jarrón chino. Luis Barcala ha contratado más tripulación. Lo próximo será marcarse un tik tok contra la moncloa. No hay nada más placentero que leer las jugosas crónicas y análisis  de la irrealidad municipal que nos hace Raúl Navarro aquí en Alicante Plaza. Quizás añadir que Barcala ha creado un nuevo icono LGTBI que ríete tú de Mónica Naranjo, Alaska y la Sarita Montiel, la mala malísima Julia Llopis que es en sí misma -espera que falta Sonia Castedo- la esencia de Vox pero en chulo. El eje progresista liderado por el socialista Paco Sanguino se desgasta lo mínimo en la trampa de osas menores pero le da cumplida réplica. Demasiado polvo en suspensión. Además, el cardenal Osorio afirma que en España "no hay partidos políticos católicos". Amén. Dios existe.

En les Corts Valencianes la sacrosanta oposición le arrea de lo lindo a Ana Barceló nº 1 y un poco menos, casi ni rozan, la finísima piel de Gabriela Bravo. Fuera siguen sonando los pasodobles porque Joan Ribó es un caborrón y en su despedida ha permitido unos actos falleros anegados por la amenaza delta. Vuelve ABBA, el peegasm y el feminismo Beyoncé. Que cumple 40. Llueve a cántaros en la Sierra de Espadán. Joe Biden anuncia la desclasificación de los papeles del 11 S. José María Aznar, Miguel Ángel Rodríguez, Sor Isabel Díaz Ayuso y la armadura y espada mágica de Santiago Abascal solo esperan que Ibai Llanos se deje de tonterías -que si gamming que si Messi- y se lance a saco a retransmitir la política -el butanito del XXI- a las nuevas hornadas populares. Alacant sigue siendo una ciudad sucia, alegre y sin ley.

Tras el asesinato en el Comité Central -nadie reclama el cuerpo incorrupto de Rubén Martínez Dalmau- Pilar Lima coloca en el Botànic al tecnócrata Héctor Illueca que es, al final, en lo que ha quedado la puntita nada más de la élite del círculo irradiante. Yolanda Díaz llama al orden -ni caso- a los suyos reclamando "cuidar la coalición" y ensayará aquí en el País Valencià su operación de refundación del espacio a la izquierda junto a Íñigo Errejón y Mónica Oltra en las próximas -cuando sean- elecciones autonómicas. Parece que el PSPV ha entrado en el Mar de la Serenidad y después de la elección de Puig como primer Secretario en noviembre se impondrá la lógica de la integración, la renovación, el impulso y la consolidación de los candidatos municipales. Así que no se esperan castings escandalosos. José Luis Ábalos reaparece como contertulio con Esperanza Aguirre, Celia Villalobos y demás en lo de Risto Mejide. Raquel Sánchez, su sustituta en el ministerio, cita el "buen vivir" de Aristóteles en la presentación de los Fondos Europeos en Elx. Ji Ping y Vladímir Putin se reparten el planeta. Y el más allá. Algunos logran subir al avión.

Penélope Cruz, espléndida y superelegantosa, eclipsa a Aitana Sánchez-Gijón, Milena Smit, a Kristen Steward y a Zendaya en Venecia. Adrián Ballester, la esperanza blanca popular, se ha retirado a los cuarteles de invierno. Y va y Gerard Fullana amb la seua aixà se va a dedicar sólo media jornada a la política porque tiene pedagogiitis y quiere enseñarle als xiquets del seu poble, Xaló, la llengua valenciana. Con el debido respeto y después de rezar tres rosarios, 4 padrenuestros y cantarle por Conchita Piquer ‘Negras Tormentas’ y otros himnos anarquistas a la Mare de Déu de Tots els Valencians, he decidido que, con permiso de ustedes, van a seguir cruzando este ordenador y no pienso matarlos ni muchísimo menos como personajes. L’amour. Amén.

Mi nunca bien ponderado ni pagado Herr Direktor Miquel González tres y repique, escribe a islas, mundos inexistentes, a la hora de la merienda y a la lluvia del verano. Burt Lancaster y Freddie Higmore cruzan nuestras piscinas en sueños y, sin saludar, desaparecen en la bruma del televisor. Se oyen disparos. Bramidos. Todo huele a arròs al forn. Los toros bajan a aguas negras y se lanzan otra vez al pozo hondo. El fuego prende el invierno. El tío Serafín coloca la bombilla en la plaza del pueblo. Ha vuelto. El milagro de una sonrisa.