Lo reconozco: Luis Barcala ha robado mi corazón de perroflauta. En medio del crudo chaparrón cuajado de drones y mascarillas va y se tira al ruedo, le brinda la faena al respetable, le cae la montera boca arriba, carraspea, se ordena la coquilla, piensa en un cantueso oro y declara: “no hay razón objetiva para suspender las Hogueras 2021”. ¿Cómo no le va a querer uno? Un servidor piensa en Tarzán, la mona chita, los ojos azules de Paul Newman, Robert Redford, Warren Beatty, Toni Cantó, el inspector Colombo, Tábata -la niña de Embrujada- y el Cañón de Colorado y siente que no son nada al lado de la elevada grandeza y profundidad intelectual del alcalde de Alicante. Dos orejas y el rabo. Pobrecita Mari Carmen de España apagada su luz allá en la oscuridad del fondo del albero de su celda en el convento, deslumbrada por la ígnea y cegadora figura de su jefe, conductor y padre espiritual. Pero esto no acaba aquí. No. Mare de Déu del Remei qué papelón que me tienen el podemita Xavi López, el compromisero Natxo Bellido y el rojo peligroso y socialista Paco Sanguino. Que el otro día se explicó como un libro abierto aclarando su voto al presupuesto por lo que está pasando. El Frente Sanguinista son los indios aullando apostados en el horizonte del Benacantil. Tambores lejanos.
Política de gestos. Qué emoción, mi corazón palpita como una patata frita contemplando esa fotografía de Pablo Casado de espaldas mirando en posición de firmes ojiplático la bandera nacional. Quinto levanta, tira de la manta. Qué falta de consideración con Su Majestad el Rey Felipe VI, la Reina Letizia y las nanas que comen a contraluz sopa de acelgas. Y con el Doctor Fernando Simón, afónico e incansable, explicándonos con auriculares de todo a cien la cosa desde su casa. Y con Toni Francés y el resto de los socialistas de la Diputación de Alicante que han donado cien mil euros y un día a la Cruz Roja. Los pueblos se llenan, se blindan de barricadas intentando frenar el turismo de mona de pascua. Aquí le vendría que ni pintada una acuchillada y desmajadeda saeta de peineta cantada por Toni Mayor, presidente de Hosbec y tesoro del Bloc. Pepito ploraba per que el catxerulo no se l’empinaba. A García Page, el lehendakari de Castilla-La Mancha, le ha robado un avión Recep Tayyip Erdoğan requisando respiradores para repartirlos entre los enfermos indígenas. Los turcos atacan de nuevo. Les enviaremos a Don Quijote, Sancho Panza, José Luis Rodríguez Zapatero, Bertín Osborne, Javier Ortega Smith, Enrique Bunbury, Arturo Pérez Reverte y a Marta Sánchez cantando ‘Soldados del Amor’ y el Himno Nacional. La CEOE ha fichado a la exministra Fátima Báñez. La prueba del algodón. Necropolítica a granel.
Aunque todos los castellonenses, alicantinos, valencianos y demás nativos sobrevenidos y semovientes estamos enamorados de Isabel Bonig, Naiara Davó, Mireia Mollà, Gabriela Bravo y nuestra chica Bond Eva Ortiz exactamente por ese orden, un servidor está locamente prendado, desgarrado y todo lo que acaba en ado de la vice-para-todo Mónica Oltra. Ella sola es capaz de montarte un hospital de campaña, desinfectar la cesta de la compra en perfecto aleman Westfäölsk, escribir mejor que William Shakespeare, José María Pemán, Agustín de Foxá y Jesulín de Ubrique juntos y por separado, devolver un saque de El Genovés i dels vinalesins Puchol padre e hijo, firmar cinco leyes y cuatro decretos leyes y resumir una farragosa y sangrienta reunión del Consell sin despeinarse. Ni tan si quiera mover una ceja. Y encima transmite como los miuras en el siglo diecinueve. Esta semana se ha revuelto contra el permiso retribuido de los funcionarios y le ha doblado el espinazo y la apuesta de Barcala y Carlos Mazón -de 600 a 750 y 1500 euros- con el plan autonómico para los autónomos. 2 autos. Y un solo destino. Qué mujer. Y yo con estos pelos. Todas, con canas, la nueva tendencia.
Lo que falta para el duro. Acaba de salir el guapo, perdón, perdón, perdón, pretendía escribir, nuestro queridísimo y apreciado presidente del gobierno, el señor Pedro Sánchez, muy desmejorado, para decir que esto va a durar por lo menos hasta el 26 de abril. Y lo que te rondaré, morena. Ni mona de pascua, ni torrijas, ni comba, ni polvitos mágicos, ni zapatillas saltadoras, ni panochas que valgan. Un alud de divorcios. Santiago Abascal y los Pactos de la Moncloa. Al alba. Luis Eduardo Aute. A Rosalía y a Nuria Oliver les sienta bien el reposo. “¡Ay Ba¡, ¡Ay Ba…Ay Babilonio que marea…” La demagogia de Donald Trump choca con la dura realidad de un sistema viejuno y oxidado, sostenido por una desigualdad extrema y la caricia & pleitesía reverencial por los AK40. No disparen al pianista. “¡Ay Ba¡, ¡Ay Ba¡…Ay Babilonio vámonos a Judea”. Tiempos de La Corte del Rey Faraón. Sí, escrita por el visionario torrentí Vicent Lleó. Tiempos de Putifar. Me pido a Ana Belén. Ximo Puig, mucho mejor. Gracias por preguntar.
Mi nunca bien poderado ni pagado Herr Direktor Miquel González, eufórico, después de contarnos sus impresiones en Cróniques de l’Aïllament d’À Punt Mèdia me llama al pozo hondo, al nevero, al campanario de la Vall de Almonacid -que acaba de tocar las cinco y media de la madrugada- a las trincheras del Pico Espadán. Joder, hace frio, se dice a sí mismo. Vuelvo a salir desnudo, sí, otra vez, en Alicante Plaza y le suelto: Folleu, folleu que el món s’acaba. Inmaculada de la Concepción empieza a tirar mis cosas por la ventana. ¡Wilma, abréme la puerta! Glorita Carratalá, Andrea Iglesias y Kate Maeetvea, mis tres hijas, descorchan la primavera. Cae un rayo en el castillo.