El Racó Gastronómico lleva años en boga en el paseo de la Estación y se ha convertido en algo casi consustancial a las mascletaes. El objetivo es disfrutar del concurso para, acto seguido, degustar tapas y bebidas a precios populares con una veintena de establecimientos locales
ELCHE. Aunque lo más esperado por la juventud en las fiestas patronales son las barracas —con sus conciertos y, sobre todo, la fiesta que seguirá durante la noche—, los más veteranos aprovechan durante el día la opción por la que cada vez más gente apuesta, el Racó Gastronómico. Una iniciativa que ya lleva años en boga en el paseo de la Estación y que se ha convertido en algo casi consustancial a las mascletaes.
El objetivo es llegar al punto para disfrutar del concurso para, acto seguido, degustar unas tapas y bebidas a precios populares con una veintena de establecimientos locales. Desde toda la gama de arroces, del negro al arroz con costra, pasando por los habituales asadores o los cada vez más de moda platos de comida asiática o vegana, es la opción ideal para una comida rápida y barata con la que empezar una larga jornada de actos y eventos en los días fuertes.
Porque el racó tiene lugar en el segundo tramo de las fiestas, en los días más especiales, del 11 al 15 de agosto, tanto por la mañana como por las noches, y durante la tarde, dependiendo de la jornada. Desde los restaurantes más de moda a clásicos del campo o de los barrios, el Racó Gastronómico no deja de ser un escaparate de la gastronomía ilicitana, al tiempo que un elemento más que vertebra ese carácter popular de Festes d’Elx al ser un espacio abierto a todo el mundo.
Previamente llegará el Racó de Ocio, también en el paseo de la Estación, y que se inauguró en 2022. Al calor de una pandemia y con las ganas de celebrar unas fiestas con más opciones, Ayuntamiento y hosteleros acordaron este racó más enfocado al ocio y que repetirá en 2023. Se encargará de rellenar el vacío previo de su hermano mayor los días 5, 6, 7, 8 y 9 de agosto, en los que también habrá gastronomía, aunque su hecho diferencial es también el de albergar conciertos de grupos locales durante su celebración. Una afluencia que en 2022 llegó esos días a las setenta mil personas, con unas catorce mil personas durante el día, según los organizadores.
No hay fiestas sin música, y en el caso de Elche hay una tradición más que centenaria de canciones tradicionales que se han mantenido y que no solo son meras canciones, sino pequeños capítulos de mitos y tradiciones de siglos de historia que crean identidad