ALICANTE. La Conselleria de Política Territorial, Obras Públicas y Transportes despeja el último trámite pendiente para desbloquear uno de los compromisos de la administración autonómica arrastrados desde el pasado mandato: la conversión del antiguo trazado del tranvía en el borde litoral de la Cantera en una vía verde. Tras cerrar la contratación de la redacción del proyecto, el departamento que coordina la consellera Rebeca Torró acaba de resolver, ahora, la contratación de la ejecución de las obras en un proceso para el que la constructora Pavasal se perfila como adjudicataria.
Como mínimo, la suya ha sido la oferta mejor puntuada en el concurso al que concurrieron otras cinco de las principales compañías del sector de la obra pública: Becsa, Grupo Bertolín, Binaria Compañía General de Construcciones y las UTE conformadas por Copcisa-Vialobra, y por Serrano Aznar Obras Públicas y Construcciones y Desarrollos Tudmir.
En concreto, la mesa de contratación, reunida el pasado 30 de septiembre, aprobó la propuesta de adjudicación a Pavasal después de que su alternativa sumase 99,91 puntos frente a los 98,71 reunidos por la UTE Serrano Aznar y Construcciones y Desarrollos Tudmir. La plica de Pavasal fue la que planteaba el segundo precio más económico, de 1.631.374 euros (sin impuestos) en una licitación que partía con un presupuesto de 1.908.460,78 euros (igualmente, sin impuestos), frente a los 1.614.176,13 ofertados por Binaria. No obstante, superó a la puntuación obtenida por esta última en el apartado de criterios que dependen de juicios de valor (40 puntos frente a 31,93). De ahí que la compañía basada en València se convierta en la responsable de ejecutar las obras.
Como informó este diario, el proyecto comprende la conversión del antiguo trazado del tranvía en la avenida de Villajoyosa en una vía verde de uso peatonal (y, en principio, abierto al tránsito de bicicletas) capaz de conectar el paseo de Gómiz, en El Postiguet, y la zona urbana de La Albufereta. En concreto, la intervención aspira a recuperar el tramo del trazado ferroviario de la línea 1 del Tram que quedó en desuso tras la puesta en servicio del túnel de la Serra Grosa, en diciembre de 2018.
Se trata de un recorrido de 1,2 km de longitud en el que se prevé adecuar la antigua plataforma ferroviaria y sus elementos asociados (el conjunto de pequeños túneles y sus andenes) para implantar un itinerario reservado para tráfico no motorizado, preferentemente peatonal, dotándole de los elementos de urbanización, balizamiento y señalización necesarios. Con ello, se prevé dar continuidad por el frente litoral al paseo peatonal existente en el lado sur, en el entorno del Postiguet, y enlazar por el lado norte con la trama viaria urbana del entorno de la playa de la Albufereta.
Las obras deberían completarse en un plazo de 15 meses a partir desde la fecha de inicio, según se determina en el pliego de condiciones. Por el momento, no se ha detallado cuál podría ser el calendario programado para que pueda llevarse a cabo. En todo caso, en la planificación económica de la licitación sí se prevé que el grueso de la inversión se concentre en el ejercicio de 2023, con lo que la actuación debe quedar prácticamente completada en ese año.