LA VILA JOIOSA. El Ayuntamiento de la Vila Joiosa está tramitando el desarrollo de dos de las parcelas que siguen vacías en la partida del Torres. La promotora es la misma que ha construido los primeros residenciales del proyecto Allonbay, la consultoría Quadratia junto al fondo de inversión británico M&G Investments. Así, el pasado 26 de julio presentaron el inicio del procedimiento de Evaluación Ambiental y Territorial Estratégica (EATE) del estudio de detalle de las manzanas 4 y 5 del PP-27.
En concreto, hacen referencia a estas dos parcelas que suman 21.000 metros cuadrados de superficie. El Plan Parcial aprobado define y califica estas dos manzanas, la 4 y la 5, de tipolgía de Edificación Abierta. Esto es, una altura máxima de entre ocho y nueve plantas. El planteamiento de la empresa pasa por tres alternativas que ponen sobre la mesa la solución a adoptar a la ordenación de los volúmenes, con retranqueos y aprovechamiento objetivo, buscando además hacerlo acorde con el paisaje urbano.
La redacción de los documentos tiene como autores a Jars Arquitectos, y concluye que la mejor alternativa pasa por la tercera solución. Es decir, la apuesta por una opción más vertical, que no haga de pantalla frente al mar.
De este modo, la alternativa número uno contaría con alturas de ocho plantas y tres bloques para la manzana 4 y 5. La número dos se ordenaría en ocho plantas y cuatro bloques. Mientras que la tercera mantiene el aprovechamiento asignado, pero disponiendo la edificabilidad en nueve alturas y estableciendo una longitud máxima del bloque en 35 metros en una línea paralela a la costa. Por su parte, en las anteriores se queda en 50 metros de bloque a lo ancho.
Para las dos primeras alternativas, concluyen que desde el punto de vista de la incidencia del paisaje y la importancia de los impactos paisajísticos "como combinación de su magnitud y de la sensibilidad del paisaje, no resulta la más recomendable ni responde a los objetivos de calidad paisajística para el ámbito de estudio". Es la tercera la que menciona que evita el efecto pantalla "y favorece transparencias entre las manzanas", tal y como se compueba en la imagen superior. Permiten, dice, ampliar los ejes visuales tanto hacia el mar como a la Torre de Sant Josep y una mayor permeabilidad del conjunto de los futuros edificios.
Como ha venido explicando Alicante Plaza, estos terrenos han cobrado una segunda vida después de la crisis inmobiliaria. La Sociedad de Gestión de Activos procedentes de la Reestructuración Bancaria (Sareb) logró vender la deuda de 79 millones de euros, tal y como informó este diario en exclusiva hace cinco años. Fue entonces cuando nació Allonbay Village, una serie de edificios singulares frente a la playa del Torres y que se inició con la construcción de Aqua Residencial. Tras él llegó Aster Residencial y Arena Residencial, cuyas viviendas ya están a la venta por importes que no pueden hacer frente todos los bolsillos: desde 170.000 euros a 750.000 euros. Con la tramitación de estos documentos urbanísticos, es el turno de seguir con la siguiente fase para Allonbay Village.
