ELCHE. No es ningún secreto que la digitalización y el uso de las nuevas tecnologías son el futuro. Esto permitirá no solo a las empresas ser más eficientes, sino que acelerarán el crecimiento global gracias a una mayor productividad. También es sabido por todos que la increíble aceleración en el desarrollo de la humanidad en las últimas décadas está teniendo graves consecuencias para nuestro ecosistema. Uno de los problemas que estamos teniendo son la acumulación de residuos plásticos y vidrios. Una solución ante esto es la llamada economía circular, es decir, reutilizar estos residuos para hacer nuevos bienes. Bien, pues la empresa que traemos hoy desde Gesem AV es Tomra Systems, una compañía noruega que utiliza las nuevas tecnologías para fomentar la economía circular.
Tomra nació en 1972 como un productor de máquinas recolectoras de botellas. Sin embargo, con el paso del tiempo la empresa ha ido adaptándose constantemente a las nuevas tecnologías y necesidades. Hoy se enfrenta a tres problemas principalmente: el exceso de residuos plásticos procedentes principalmente de envases, la escasez de alimentos en un futuro cercano y el malgasto de los alimentos que hoy por hoy producimos. Para afrontar estos problemas que nos afectan a todos, Tomra ofrece los siguientes productos y soluciones.
En el caso de los envases plásticos y de vidrio, la empresa vende máquinas de recolección. Actualmente cuenta con más de 80.000 instalaciones en más de 60 mercados, posicionándose como el claro líder mundial (más del 70% de cuota de mercado). Estas máquinas, además, cuentan con la más avanzada tecnología de identificación. Esto les permite ser más rápido en la detección de los envases y agiliza el proceso de recolección.
Una vez recolectados los residuos, la empresa hace uso de tecnología basada en sensores para filtrar y ordenar estos. Esta tecnología es una de las principales ventajas competitivas de la empresa. Gracias a los más de 320.000 que escanea por segundo, la empresa puede identificar todo tipo de material con una alta precisión. Esta tecnología, además, se utiliza tanto para el sector de reciclaje como para el de minería. Sin embargo, esta tecnología no se vende por separado, sino que viene incluida en sus máquinas de gestión de residuos. Estas son las máquinas que ellos emplean para la recuperación de materiales. Estos materiales provienen de los plásticos que ellos han recaudado y son ofrecidos a empresas como materia prima.
Por otro lado, Tomra cuenta con máquinas y tecnologías específicas para el sector minero. La esencia es la misma, identificar y clasificar correctamente los materiales. Sin embargo, dado la complejidad en este sector no pueden emplear las mismas máquinas ni la misma tecnología que en el segmento de reciclaje. Aun así, este esfuerzo tiene su recompensa ya que este sector hace un gran uso energético, consumiendo entre el 2%-3% del total de energía producida en el mundo. Gracias a estas máquinas, las empresas pueden ahorrar hasta un 15% su consumo energético.
Por último, la empresa también opera en el sector de la alimentación. Ofreciendo soluciones a los productores para la maximización en la utilización de los productos y minimizar los residuos. En la producción de alimentos a gran escala, estos son desechados si se detectan imperfecciones o no cumplen con unos criterios. A mayor precisión en la identificación de estos menores serán los residuos.
Como vemos, la empresa cumple una gran labor en la lucha contra la contaminación. Pero es que, además, lo hace con unas rentabilidades asombrosas. La empresa viene creciendo a tasas por encima del 10 de media y de manera ininterrumpida los últimos 10 años, con márgenes netos entorno el 10% y retornos sobre la inversión por encima del 10%. La deuda de la empresa está contenida, situando la deuda neta sobre EBITDA por debajo de 1 y con una tasa de conversión del beneficio neto en flujo de caja cercano al 100%, lo cual le permite acumular caja año tras año para reinvertirlo en el negocio.
Como conclusión, estamos ante una empresa tecnológica centrada en la economía circular y con un modelo de negocio asentado, manteniendo posición de liderazgo en todos los sectores en los que opera, y rentable. El único punto algo negativo quizás es su valoración, ya que cuenta con un P/E de 77x. Sin embargo, creo que una empresa con estas características de rentabilidad, calidad y potencial de crecimiento se puede permitir cotizar a ratios más elevados.
Kevin González es analista de Gesem AV