ALICANTE. Desde Carlos Parodi al delegado, pasando por los tres integrantes de la comisión deportiva (Ramírez, Barroso y Portillo), la totalidad de la plantilla y obviamente el entrenador, Luis García Tevenet.
Todos comparecían en la sala de prensa del estadio José Rico Pérez para transmitir una imagen de unión y frenar la avalancha de rumores (y no rumores) sobre la inminente destitución del técnico sevillano o la existencia de diferencias entre plantilla y directiva.
"Todos estamos en el mismo barco (...), se acabaron los rumores: Luis será el entrenador" hasta el final de esta temporada e "incluso de la siguiente, si no hay una hecatombe", que el socio de Enrique Ortiz en el Hércules identificaba con la no clasificación para el play off.
Restan once jornadas por delante para alcanzar el objetivo de clasificarse para el play off, que se encuentra ahora a cinco puntos (más el 'golaverage') y será con el técnico sevillano al mando. Ramírez, que confesaba haber hablado con él la tarde del domingo y verle "con fuerzas ", reafirmaba su confianza tanto en el técnico como en la plantilla, al tiempo que pedía a los medios de comunicación que se sumaran a la muestra de unión y pedía un voto de confianza.
En la misma línea se manifestaba uno de los capitanes, el veterano Francisco Peña. Fueron los únicos en intervenir en una comparecencia fugaz, pero en la que Ramírez reconoció que, a diferencia del pasado, con el proyecto que encabeza Tevenet tiene más paciencia, pero porque ve al técnico "con fuerzas" y no solo eso: cree firmemente que, pese al nivel de juego exhibido en las últimas jornadas (cinco derrotas en siete partidos), el equipo tiene opciones no ya de clasificarse para el play off; también, de ascender.