Sory Kaba: "No sabes cómo grité el gol de Pere Milla en Girona"

27/11/2024 - 

ALICANTE. Sory Kaba regresaba el pasado verano al Elche, club que no duda en calificar como su casa y con cuyo primer equipo logró un ascenso al fútbol profesional en 2018. 

Lo hacía el último día de apertura del mercado estival de fichajes, en el marco de una cesión hasta final de temporada por Las Palmas.

Tras protagonizar en 2019 el hasta entonces traspaso más importante (en lo económico) de la historia de la entidad del Martínez Valero, algo que le llevó a iniciar una andadura por el fútbol francés, danésbelga e inglés, disputar competiciones europeas, ganar títulos y alimentar su número de internacionalidades, hace 11 meses regresaba al fútbol español para jugar en LaLiga EA Sports. Una categoría a la que no esconde que desea volver, pero tras lograr un ascenso de franjiverde.

A sus 29 años, el delantero guineano repasa con Alicante Plaza algunos de los episodios más importantes de su carrera, al tiempo que afronta preguntas espinosas sobre su momento de forma, algo que le ha llevado a tener un papel secundario en el equipo de Eder Sarabia.

- Pregunta: Cuando te llama el Elche este verano para ver tu disposición a regresar imagino que no te lo piensas...

- Respuesta: No, cuando me llamó Pedro (Shinocca) me embargó la felicidad; como sabes esta es mi casa, estoy donde la gente me quiere, tengo a mi familia cerca, a mi hijo.

El Elche me lo ha dado todo: apostó por mí en su momento, aquí empecé de cero y todo lo que soy es gracias a este club. Lo he seguido siempre. ¡No sabes cómo grité el gol del ascenso de Pere Milla!

- P: Ahora el objetivo sí es el ascenso... 

- R: Yo vengo con ese objetivo, pero teniendo presente que esta Segunda División es muy difícil. Ahora estamos bien, siendo fuertes en casa, nos identificamos con la idea de fútbol del entrenador y hay una comunión con los aficionados que es algo muy importante porque la temporada es larga y habrá momentos mejores como el domingo contra el Real Oviedo, pero también peores.

- P: ¿Cuándo te diste cuenta de la verdadera dimensión que tiene el Elche, con el descenso de 2017 o con el ascenso del año siguiente?

- R: Con el descenso a Segunda B. Yo estoy empezando y veo el ejemplo de jugadores como 'Nino' o Edu (Albacar) que se quedan para devolver al equipo al fútbol profesional. Eso no se me va a olvidar. Luego ascendimos y seis meses después me llegó del Dijon una buena oportunidad tanto para mí como para mi familia y el propio Elche.

- P: ¿Cómo es de distinto el Sory actual de aquel que se marcha traspasado en 2019?

- R: A ver, como futbolista sigo siendo el mismo Sory, pero con más experiencia; como persona soy más maduro porque tengo un hijo.

- P: Si sirve de termómetro, la mecha que llevas en el pelo es más discreta...

- R: (Risas) Lo es, lo es. He crecido, tengo más experiencia, ahora no es el mismo contexto que cuando debuté aquí, que iba para arriba sin miedo a nada, pero en el fondo soy el mismo futbolista.

- P:  Volviendo con alguno de esos pesos pesados del vestuario, recientemente el club propició un encuentro con 'Nino'. ¿Lo podemos considerar un hermano mayor para ti?

- R: Sí, es como mi hermano mayor; he aprendido mucho a su lado, le respeto y admiro. Fue muy importante para mí en su momento y también la semana pasada: necesitaba sus consejos y creo que me ha venido bien como también el cariño de la gente el domingo los minutos que jugué; no me lo esperaba y me ha ayudado a limpiar la cabeza, me sentí muy afortunado, disfruté.

- P: ¿Ansiedad por no marcar? 

- R: Mi lenguaje corporal puede dar a entender que sí, pero te aseguro que no: estoy tranquilo, sé que voy a marcar goles; después del primero llegará el segundo y así. Como me dijo 'Nino', tengo que seguir trabajando, aceptar mi rol. No soy Messi, pero los minutos que tenga los voy a aprovechar para ayudar al equipo y si es haciendo goles, pues mejor. 

- P: ¿Qué tal Sarabia?

- R: Bien, es un tío de fútbol y a mí me encanta el fútbol. Aprendes mucho de él, creo que estamos creciendo todos gracias a él porque como te decía antes nos identificamos con lo que quiere y eso nos estimula todavía más.

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