ELCHE. Tras la situación de deterioro que sufre la escalera de la Banca Peral, un inmueble de protección estructural debido a su valor patrimonial que tiene como elementos destacados la fachada o la ubicación de la escalera, Alicante Plaza dio a conocer el estado de la misma. O bien se ha empezado a desmantelar, ya que obstaculiza el proyecto redactado para el inmueble, o bien está en mal estado por al falta de mantenimiento —para ambos casos hay obligación de cumplimiento según la normativa del catálogo de protecciones municipal—. En cualquier caso, la concejalía de Urbanismo informa de que esta se puede desmantelar para después reubicarla.
Como se advertía ayer, la protección estructural, parcial en este caso, obliga a la protección de la envolvente de los inmuebles, y para el caso concreto los elementos a tener en cuenta son la fachada y sus materiales, así como la ubicación de la escalera. Una situación que podía ofrecer interpretaciones distintas. Sin embargo, en la Comisión de Urbanismo celebrada el miércoles, técnicos de la concejalía confirmaron al edil del área, José Manuel Sánchez, que por la protección y la especificación de la 'ubicación de la escalera' —y no de la escalera a secas—, se puede retirar por las obras y reconstruir en la ubicación una vez finalizadas estas.