La voz cantante de Love of Lesbian reflexiona sobre el paso de la banda por los festivales con motivo de su paso por el Festival de les Arts, el número nosecuantos en el que encabezan el cartel
VALÈNCIA. Tan solo 10 minutos junto a Santi Balmes, líder y cantante de Love of Lesbian, una de las bandas favoritas de los festivales españoles desde hace casi 20 años. Las prisas en esta conversación se deben a que “la música llama” y cabe tenerlo todo a punto: “Tenemos poco tiempo pero voy a ser increíble y voy a lanzarte mil frases”, asegura el cantante, quien ya demuestra esto mismo a través de sus temas, que en unas horas se corearán por miles de valencianos del Club de fans de John Boy.
-Antes de empezar, ¿cómo estáis?
-Estupendamente, con muchas ganas de subirnos al escenario y emocionados de estar en València, que es un poco lo que se dice siempre pero te juro que lo pensamos de verdad [ríe]. Con un poco de prisas pero todo bien.
-Arrancamos pues. Ahora os subís a un escenario post pandémico, sin embargo hicisteis historia con vuestro concierto masivo en Barcelona, ¿qué se siente al vivir ambas partes?
-Es algo increíble, hemos tenido el privilegio de haber visto y vivido la progresión, de ver a la gente alineada a lo Walking Dead a verla saltando y agolpándose, con muchas ganas de volver a esto que tenemos ahora. Es genial ver al público reunido y sin distancia social de por medio.
-Como decís en Escuela de danza aérea: “Huir de la cárcel y que corra el aire”
-Totalmente, cuando vivimos el “experimento” del concierto masivo en Barcelona fue algo muy emocionante, pero ahí no sabíamos si iba a ser un paréntesis o algo más largo. Fuera como fuese es espectacular verlo.
-¿Conciertos “masivos” o festivales?
-La cultura del festival es muy pica-pica, en un concierto existe la voluntad directa de verte. Esto tiene más fuerza para nosotros, los festivales son la porta da, estás tocando para 30.000 personas como queriendo ser un John Malkovich. Sin embargo adoramos a los “conversos” que nos escuchan en los festivales y luego se nos siguen allá por donde vamos. Esos raros del Club de fans de John Boy que luego se convirtieron en fans.
-¿Qué hay de la intimidad de los conciertos?
-Tiene mucha fuerza para nosotros, es una forma más directa y provechosa de comunicarnos con la gente. En los conciertos se siente el reencuentro, el de la gente y la música que ha formado parte de sus vidas, es como una experiencia catártica. Lo más bonito es vivirlo desde el escenario, nos gusta mucho más ver cómo dos personas se cantan el tema mirándose a los ojos que a nosotros.
-¿Qué ha supuesto la pandemia para vosotros?
-Está siendo un año surrealista en todos los aspectos, de inicio a fin. Fue duro darnos cuenta de las hostias que hay que meterse para conseguir una sala para tocar, y ver que según que ciudades había más o menos oportunidad. De todos modos, y mirándolo de forma positiva, es un año en el que hemos tenido que ir sin poner la quinta, con mucha soltura. También cabe comentar que la pandemia tuvo una pequeña parte buena, ya que gracias a esta pudimos reflexionar mucho sobre las letras de las canciones y crear Viaje Épico Hacia la Nada, que en gira ha recibido una respuesta arrolladora.
-Rescato una declaración que hiciste en conversación con Culturplaza allá por el año 2016: “Love of Lesbian empezará a reducir su presencia en los festivales”... ¿y bien?
-Esta no me la esperaba [ríe]. En nuestra defensa diré que este año hemos estado más fuera de España que dentro… A nosotros nos encantan los festivales, pero en la idea de desaparecer del circuito está la voluntad de probarnos a nosotros mismos. De hacer un Múnich delante de 350 personas o un Londres delante de 600… Sin luces y sin toda la parafernalia, creando algo más puro.
-Esa voluntad no quita vuestro encabezamiento en los festivales años atrás. De hecho hay hasta quien bromeaba con “El primer festival sin Love of Lesbian”
-La realidad es que nuestro nombre choca bastante, y a veces parece que suena más. Nos hemos rodeado de bandas que siempre han estado compartiendo cartel con nosotros y no se les ha mencionado tanto… Lo de los festivales ha sido ponernos un sambenito que no nos correspondía del todo. Eso sí, siempre hemos estado encantados de tocar en festivales, nos enorgullece muchísimo.
-¿De qué bandas os gusta rodearos?
-Ahora mismo vemos que pegan muy fuerte Veintiuno, Viva Suecia y Las Ginebras, que lo están petando. Da gusto poder compartir escena con esta gente, es carne fresca y tienen una nueva manera de enfocar las cosas, yo personalmente miro a estos grupos con mucha ternura. En el caso concreto de Las Ginebras no nos extraña nada que les esté yendo tan bien, están siguiendo un estilo que nos parece que aún no había acabado de sonar del todo.
-¿Y qué es lo que va a sonar nuevo de Love of Lesbian?
Ahora mismo tenemos temas nuevos pero no sabemos cuándo nos pondremos a grabarlos en serio. Hay que dedicarle mucho tiempo y cariño, un disco de Love Of Lesbian siempre tiene una gran presión de superar al anterior. En mi proceso primero va la música y luego la letra, así que de momento puedo decirte que tenemos muchas medias canciones.