BENIDORM. El Ayuntamiento de Benidorm ultima su ordenanza de Publicidad para la que ha entregado el último borrador a los grupos municipales para que den sus últimos aportes y alegaciones al texto. Se trata de un documento que estaba a la espera de la modificación puntual número 20 del Plan General, pero que finalmente se ha dividido en dos para agilizar los trámites. De este modo, el nuevo borrador ha actualizado al anterior, que corrige algunos errores y admite aportaciones de los grupos transmitidas hace más de un año.
La intención es que Benidorm tenga una regla a la que atenerse para regular la instalación de publicidad en la ciudad para paliar los problemas que han ido surgiendo en la colocación de instalaciones publicitarias desde la aprobación del actual Plan General, tal y como se justifica en el mismo documento.
Asimismo, manifiestan que "es evidente la proliferación ilegal de las vallas y monopostes publicitarios, incidiendo muy negativamente en el paisaje urbano y en el entorno de la ciudad". Además, considera que los beneficios que consigue el promotor son suficientes para que sea rentable a pesar de la sanción, por ello, proponen que éstas se impongan en función al beneficio obtenido.
No obstante, el baremo incluido en todas las sanciones que recoge esta ordenanza es de 300 a 3.000 euros, ateniéndose a la ley y según la gravedad de la infracción. Entre otras muchas especificaciones, indican que las dimensiones normalizadas de la superficie publicitaria de los carteles serán de como máximo 8 metros de ancho por 3 metros de alto y no se permitirá la agrupación en vertical de carteles.
En cuanto a las banderolas y banderines, solo se permitirá uno por establecimiento. En cuanto a las pantallas de leds, plasma o similares, darán prioridad a las que usan dispositivos de ahorro energético y fuente de energías renovable.
