ALICANTE (EP). El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha comunicado este domingo a los presidentes de comunidades y ciudades autónomas que será la Administración central la que fije las "reglas comunes" que todos deberán seguir para la desescalada tras la etapa de confinamiento provocada por la pandemia de coronavirus.
Así lo ha manifestado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, en rueda de prensa en el Palacio de la Moncloa después de la videoconferencia que ha mantenido Sánchez con los dirigentes regionales, en la que le ha trasladado que recabará sus propuestas para estudiarlas, pero que "tiene que haber un criterio común" para todo el Estado de cara a la desescalada.
Illa ha recordado que el estado de alarma establece el mando único del Ejecutivo central, aunque "mucha parte operativa" para poner en práctica las medidas "requiere de la colaboración entre los distintos niveles de administración", así que lo que ha propuesto el presidente es "una desescalada asimétrica en función de la situación y capacidad de respuesta", acordando las zonas a desconfinar, siempre dentro de una "métrica común".
"Las actividades que se vayan abriendo son comunes, pero esto no significa que no haya una parte muy importante a gestionar por parte de las comunidades autónomas", ha remarcado el ministro, quien ha adelantado que este lunes se ha convocado una reunión con los consejeros regionales para que transmitan sus propuestas de cara a la aprobación del plan de desescalada que aprobará el próximo martes el Consejo de Ministros.
De este modo ha contestado Illa a las reclamaciones que han planteado los presidentes autonómicos en la videoconferencia con Sánchez, en la que el lehendakari, Iñigo Urkullu, y el dirigente catalán, Quim Torra, son los que se han mostrado más críticos con la actuación del Ejecutivo y ambos han pedido recuperar sus competencias.
Urkullu ha reclamado "más criterios y menos tutelas" para abordar la desescalada y ha insistido en trabajar desde "el modelo de codecisión de Alemania, que comparte los criterios generales respetando los marcos competenciales en un Estado compuesto". Mientras, Torra ha pedido una vez más gestionar esta fase desde las autonomías porque en el confinamiento "la centralización no ha funcionado".
Los presidentes del PP, por su parte, han exigido a Sánchez que comparezca ante la Comisión General de Comunidades Autónomas del Senado, reclamación que hizo esta misma mañana el presidente de su partido, Pablo Casado, para debatir en ese foro el plan de desescalada. Además, cada uno ha solicitado medidas concretas para poner en funcionamiento en sus territorios.
Así, por ejemplo, el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, ha rechazado que la desescalada se haga por provincias, como plantea el Gobierno, y ha sugerido que el desconfinamiento se inicie también con "criterios demográficos", mientras que el dirigente andaluz, Juanma Moreno, ha planteado la apertura del comercio en general, incluidas peluquerías y establecimientos de estética personal, a partir del próximo 11 de mayo, y de bares y restaurantes a partir del 25 de mayo.
Fernando López Miras, presidente de la Región de Murcia, se ha mostrado partidario de que el Gobierno fije "directrices concretas", pero también quiere que se establezcan criterios para que esta comunidad no se convierta "en receptora" de personas contagiadas de otras regiones cuando se permitan los desplazamientos entre territorios.
Por su parte, la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha exigido a Sánchez una estrategia "clara" de desconfinamiento para saber a qué atenerse "semana a semana".
Desde Cantabria, Miguel Ángel Revilla, ha solicitado que comience la desescalada de las actividades económicas y se permita la apertura de comercios y también actividades habituales en la región como el cultivo en huertas, ir a pescar con caña o en bote, a recoger setas o a hacer surf.
En general, los presidentes autonómicos socialistas están de acuerdo con que haya criterios comunes para todas las comunidades, aunque la dirigente de Baleares, Francina Armengol, ha pedido a Sánchez "un margen de decisión propia para regular la ejecución" de las medidas de desconfinamiento.
El presidente canario, Ángel Víctor Torres, por su parte, defiende la asimetría en la desescalada y por eso ha transmitido al jefe del Ejecutivo que el archipiélago ya está listo para iniciarla, ya que se cumplen con los parámetros de capacidades y de recomendaciones sanitarias. En este sentido, ha dicho que Sánchez ha tomado nota de esta propuesta y que no ha habido un 'no' por respuesta.
Sin embargo, y ante una de las preguntas que se le han formulado en la rueda de prensa relativa a la situación de Canarias, el ministro de Sanidad ha dejado claro que esta comunidad "no va a empezar" a aplicar su propio programa de desescalada este lunes.
Illa ha hecho hincapié en que las comunidades sólo podrán empezar a actuar en este sentido una vez que el Consejo de Ministros apruebe el plan general el martes y que, en cualquier caso, únicamente podrán empezar a relajar medidas en todo o parte de sus territorios cuando comprueben que se cumplen los indicadores que se van a fijar en el mismo.
"En el marco del plan que se aprobará el martes, se podrá empezar a evaluar qué comunidad o qué parte de cada comunidad cumple los requisitos", ha enfatizado Illa, incidiendo en que la desescalada se hará de forma "gradual y coordinada". "No le perdamos el respeto al virus", ha repetido en varias ocasiones.
El ministro ha insistido en que las comunidades autonómas ejercerán un "papel fundamental" en la desescalada, pero no sólo ellas, sino también el conjunto de las administraciones públicas como diputaciones o ayuntamientos. Por eso, ha vuelto a decir que el Gobierno recogerá sus propuestas y el Ejecutivo fijará "un conjunto de indicadores" para así "actuar coordinadamente".