VALÈNCIA (EFECOM). Banco Sabadell recibirá más de 400 millones de euros tras ganar en el Reino Unido un juicio contra el fondo Cerberus por la venta de carteras inmobiliarias, según la sentencia a la que ha tenido acceso EFE este miércoles.
De esta forma, Cerberus tendrá que pagar 358 millones de euros al Banco Sabadell por la venta de unas carteras en 2019, a lo que se suman 48 millones por intereses y, adicionalmente, las costas del proceso judicial.
En 2018, el Banco Sabadell abrió un proceso de subasta para vender activos tóxicos -las carteras 'Challenger', 'Coliseum' y 'Rex'- con un valor bruto cercano a los 6.414 millones de euros y, tras ese proceso competitivo, finalmente los inmuebles fueron adjudicados y transferidos a Cerberus en 2019.
El fondo se comprometió a pagar cerca de 3.500 millones de euros por esos inmuebles, aunque se estableció que parte del pago, unos 600 millones, se abonarían en el futuro, ya que algunos inmuebles estaban aun en fase de reposesión o de subasta.
El Sabadell tenía un plazo de 3 años, hasta finales de 2022, para resolver esta situación y que todos los inmuebles figuraran a su nombre el Registro de la Propiedad para poder traspasarlos a Cerberus.
Antes de esa fecha, el banco ya había conseguido actualizar la información de los inmuebles de la cartera 'Coliseum', por lo que Cerberus abonó cerca de 180 millones y el pago pendiente bajaba, en números redondos, a unos 400 millones de euros.
Posteriormente, el Banco Sabadell cumplió también con los registros de los activos de las otras dos carteras 'Challenger' y 'Rex' en un paquete de inmuebles valorados en 365 millones y fue entonces cuando se desató el conflicto.
Cerberus se negó a pagar el total de lo restante, con el argumento de que no se había registrado la totalidad de los activos, lo que llevó al Banco Sabadell a denunciar al fondo en enero de 2023 en el Tribunal Superior de Justicia de Inglaterra.
A principios de noviembre se produjo el juicio y ahora se conoce el fallo que da la razón al Sabadell y condena a Cerberus a pagar 358 millones por la venta de esos activos, más 48 millones en intereses y las costas del proceso judicial.
La noticia llega en un momento en el que el Banco Sabadell defiende su futuro en solitario frente a los planes del BBVA, pendiente del visto bueno del supervisor bursátil y del veredicto final de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia para lanzar una opa sobre la entidad.
La decisión judicial tendrá un impacto positivo para el Sabadell en términos de reducción de préstamos morosos así como de menores provisiones y mayores coberturas. Por tanto, supone una mejor en la calidad de los activos y el perfil de riesgo el banco.
Este impacto positivo posiblemente se observe ya en las cuentas del cierre de este trimestre.