Riera y Baño pulsan sus apoyos en la Cámara y marcan marzo en rojo para seguir hablando

ALICANTE. Calma tensa en la Cámara de Comercio de Alicante. Desde que, en plena Noche de la Economía Alicantina, presidente y vicepresidente segundo desvelaron sus intenciones de optar a la presidencia en el próximo proceso electoral, nada se ha movido. Ni falta que hace, de momento. Aunque el periodo electoral ya ha sido convocado por el Ministerio, el calendario en Alicante (y en la mayoría de cámaras) se pondrá en marcha en marzo, de forma que Juan Riera y Carlos Baño tienen tres meses por delante para seguir negociando.

Es más, el rifirrafe electoral no ha enturbiado la relación entre los dos dirigentes, que siguen perteneciendo al mismo comité ejecutivo. Este pasado sábado se pudo ver a Riera entre los asistentes a la noche grande de Baño, la entrega de los premios en primera gala de Facpyme, la principal asociación de comercios de la provincia. Un acto en el que, además de la sintonía con Carlos Mazón, de quien Baño insiste en desvincularse, el presidente de Facpyme presumió de respaldo entre su sector, que elige al 12% de los vocales del pleno de la Cámara.

Pero que la cordialidad guíe las relaciones entre los dos mandatarios y que haya tres meses hasta el inicio oficial de la pugna, si no hay un acuerdo antes, no quiere decir que los dos aspirantes no estén ya echando números. Tal como ha podido constatar Alicante Plaza, uno y otro vienen pulsando sus apoyos entre el empresariado local en las últimas semanas, para definir sus estrategias de cara a posibles pactos. Una tarea en la que ambos se han implicado personalmente, con reuniones y llamadas telefónicas.

El problema es que el mecanismo de elección del presidente de la Cámara, en dos tiempos, dificulta mucho este tipo de cálculos, como reconoce uno de los empresarios contactado por los dos aspirantes. "El proceso electoral de la Cámara muchas veces no lo entendemos ni nosotros, como para pelearse estamos", admite. En realidad, lo que se votan son miembros del pleno, por distintas 'circunscripciones' o sectores, de los que luego sale elegido el presidente. "De poco sirve contar votos ahora, sin saber si esos apoyos van a ser luego vocales".

Como ha contado este diario, Baño y Riera estuvieron negociando durante varias semanas antes de la Noche de la Economía, el pasado 4 de noviembre, para intentar cerrar una candidatura única en la que el presidente de Facpyme quedase como vicepresidente primero (ahora lo es Antonio Arias, de Vectalia) para, llegado el momento, suceder a Riera. Pero no hubo acuerdo, y Baño lanzó su candidatura horas antes de que el presidente de la Cámara hiciese lo propio durante su discurso.

La Conselleria de Economía, la CEV y los pesos pesados de la Cámara como el propietario de Masymas, José Juan Fornés (pieza clave en el anterior pacto y en la integración de Uepal en la CEV) asisten con preocupación al nuevo escenario, dado que todos apostaban por una sucesión ordenada, bien en primera instancia (si Riera no se presentaba), bien con la fórmula de dos años para uno y dos para el siguiente. 

El presidente actual quiere dejar comenzadas las obras de la nueva sede antes de abandonar el cargo, pero el problema es que la tramitación para conseguir luz verde del Consell para vender el Palas, la cesión de la parcela del puerto, y la licencia municipal puede llevar más tiempo de esos dos años. Hasta marzo, pues, queda tiempo para seguir hablando, y de momento todos asisten expectantes a los movimientos de uno y otro.